Qué reveló el análisis de Maryfer Centeno sobre Emma Coronel: “Le gustaba ser la mujer del Chapo”

En febrero de 2021, Emma Coronel Aispuro fue detenida en el aeropuerto de Dulles en Virgina, Estados Unidos. En aquella ocasión, la tercera esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán fue acusada de haberse beneficiado de las operaciones ilícitas del poderoso y peligroso Cártel de Sinaloa.

Aunque su esposo ya había sentenciado a pasar el resto de sus días en una prisión de máxima seguridad, poco se sabía sobre la situación jurídica que enfrentaría la exreina de belleza por lo que, en cuestión de horas, las imágenes de su detención acapararon los titulares y portadas de los medios de comunicación más populares de México.

Fue así como la grafóloga y experta en lenguaje corporal, Maryfer Centeno, se dio a la tarea de analizar cada actitud y movimiento de Emma Coronel, desde antes de convertirse en la esposa de uno de los narcotraficantes más buscados del mundo y hasta el día de su detención.

Durante una transmisión que Maryfer Centeno realizó en su cuenta verificada de Facebook mostró una de las fotografías más antiguas de la esposa de Joaquín Guzmán Loera. Y es que, durante su juventud, Emma Coronel destacó entre las comunidades de Durango y Sinaloa por su participación en certámenes de belleza locales, no obstante, sería su postura la que reflejaría un peculiar rasgo sobre su personalidad.

En distintas fotografías a la joven reina de belleza se le observa lucir vestidos dorados o amarillos y, aunque por si solos dichos colores la hacían resaltar del resto de las concursantes, su pose ante las cámaras con la barbilla alzada era la que reflejaba una actitud de superioridad, de acuerdo con el análisis de Maryfer Centeno.

“Emma Coronel es una mujer que desde joven supo que ese no era su lugar [...] ella no tenía que quedarse donde estaba, tenía el derecho y la obligación de prosperar”, se le escucha explicar a la controversial grafóloga.

Emma Coronel es hija de Inés Coronel Beltrán y de Blanca Aispuro, un campesino y una ama de casa que intentaron buscar una mejor calidad de vida en Estados Unidos, donde nació su hija, no obstante, tiempo después regresarían a México, específicamente a la ranchería La Angostura en Canelas, Durango.

Pese al humilde estilo de vida que sus padres le dieron a la exreina de belleza, de acuerdo con el análisis de su lenguaje corporal que realizó Maryfer Centeno, Emma Coronel siempre fue ambiciosa y supo realmente lo que quería. Del mismo modo, la grafóloga apuntó que la esposa de Joaquín Guzmán Loera le gusta usar prendas de colores amarillo y dorado ya que el cerebro los relaciona con cuestiones de poder, dinero y abundancia, una imagen que ella siempre buscó transmitir.

Respecto a su aspecto físico, Maryfer Centeno señaló que aunque ha sido influenciado por estereotipos de belleza socialmente inculcados, Emma Coronel es una mujer que “sabe ser bonita” y lo aprovecha para lograr sus objetivos.

En la cuenta que Emma Coronel tenía en Instagram en diversas ocasiones compartió una fotografía que más tarde se convertiría en la portada del libro Emma y las otras señoras del narco de la periodista Anabel Hernández.

Aunque la postura y elementos como el cabello y los labios pintados de rojo denotan seguridad y una mirada desafiante, Maryfer Centeno señaló en su análisis que la popular fotografía está llena de símbolos como la corona de espinas y el collar que podrían demostrar todo lo contrario.

La grafóloga explicó que aunque Emma Coronel trató de mostrarse como una mujer segura de sí misma, en realidad la fotografía apunta a que se sentía prisionera, ya que el collar que rodea su cuello tiene apariencia de cadena. Por lo que aseguró que, a pesar de ser una reina, la esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán se sentía atada y no disfrutaba de su libertad, aún y cuando no estaba en prisión.

En su transmisión en vivo, Maryfer Centeno realizó también el análisis de algunas cartas de Emma Coronel, las cuales también revelaron parte de la personalidad de la exreina de belleza, así como de lo que sentía en el momento que las escribió.

El primer elemento que la grafóloga destacó que es que la esposa de Joaquín Guzmán Loera tiene una letra infantil, ya que es muy redonda, lo que implica que es una mujer muy sensible que tiende a ser vulnerable. No obstante Maryfer Centeno señaló que en los puntos de la letra i, Emma Coronel coloca un triángulo en lugar de un círculo lo que da indicios de que es una persona caprichosa, agresiva y territorial, dispuesta a defender lo que es de ella.

Según la controversial grafóloga la letra de la exreina de belleza también denota que difícilmente cae en abnegación o sumisión y que lo hace solo cuando hay fuertes intereses de por medio. Asimismo, señaló que Emma Coronel no estaba enamorada de El Chapo Guzmán, sino de lo que representaba.

“Le gustaba ser la mujer del Chapo, no por los sentimientos sino por lo que representaba ser la mujer de él [...] Ella no está enamorada del ser humano, ella está enamorada de la idea que tiene de él”, mencionó en su análisis Maryfer Centeno.

Además de asegurar que Emma Coronel sabe que con su cuerpo puede seducir para lograr sus objetivos, Maryfer Centeno apuntó que su lenguaje corporal dice que es una persona dominante y ególatra.

La grafóloga sustento su premisa apuntando a que la esposa de Joaquín Guzmán Loera suele tener atuendos para cada ocasión entre los que destaca el uso de cinturones para acentuar sus curvas y los colores amarillos o metálicos. El hecho de que la exreina de belleza destaque siempre su cintura Maryfer Centeno aseguró que es un signo de que es controladora, además de que la catalogó como una mujer “adicta a la moda”, lo que refleja una necesidad de aprobación.

En resumen, la controversial grafóloga definió a Emma Coronel como una mujer sensible, influenciable, agresiva, territorial que no tiene mucha formación académica y vulnerable a pesar del poder y fama que ha adquirido. Por ello, aseguró que los titulares sobre su detención pudieron haberla afectado emocionalmente.

No obstante, apuntó Maryfer Centeno, Emma Coronel tiene un mecanismo de defensa tan fuerte que incluso en las fotografías de su aprehensión se le aprecia con la barbilla en alto, justo como se mostró desde sus inicios en los concursos de belleza de su comunidad.