Madrid, 17 abr (EFE).- El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades incrementará un 18,5 % el salario mínimo de los jóvenes que hacen un doctorado industrial -realizan su tesis y reciben un sueldo por trabajar-, y a partir de ahora las empresas no serán las únicas beneficiarias de este programa estatal.
Son novedades de la última convocatoria de doctorados industriales a la que se podrá concurrir a partir del próximo martes, día 23, y que, tal como anunció la ministra Diana Morant el pasado octubre, duplica su presupuesto respecto a la anterior edición, pasando de cuatro a ocho millones de euros en el periodo 2024-2027.
Además del aumento salarial de un 18,5 % sobre la anterior convocatoria de 2022, otra innovación es que las ayudas no solo se destinarán a las empresas sino también a entidades privadas sin ánimo de lucro y administraciones públicas que no son ejecutoras de ayudas de I+D+i pero tienen proyectos de transferencia de conocimiento.
Se ha incluido también una nueva partida para gastos de ejecución del proyecto: serán costes financiables por parte del beneficiario el concepto de gastos de contratación, de movilidad del doctorando y otros gastos de ejecución del proyecto.
Por otro lado, aumenta la ayuda para la realización de estancias, equiparándose la cuantía con la proporcionada en las ayudas para contratos predoctorales asociados a proyectos de I+D.
Por último, el plazo de solicitud será más amplio respecto a la convocatoria previa y se duplicará para facilitar y estimular la participación; comenzará el 23 de abril y acabará el 4 de junio de 2024.
La finalidad de las ayudas de doctorados industriales es promover proyectos de investigación industrial o de desarrollo experimental en los que se enmarque una tesis doctoral para favorecer la inserción laboral del personal investigador desde los inicios de su carrera y promover la incorporación de talento en el tejido productivo y socioeconómico.
El desconocimiento acerca de los doctorados industriales es uno de los principales obstáculos para su plena implantación en España una década después de su puesta en marcha, de modo que solo 280 universitarios se acogieron a esta fórmula en 2022 frente a los 1.650 de Francia.
Dinamarca, el país europeo con la experiencia más dilatada -50 años-, ha evaluado el programa y ha concluido que las empresas participantes han duplicado sus solicitudes de patentes anuales y han aumentado sus beneficios, al tiempo que los estudiantes gozan de mejores sueldos y puestos respecto a los que cursaron un doctorado no industrial. EFE
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