Un presunto caso de maltrato animal durante las festividades de la vereda Chenche, en el municipio de Purificación (Tolima), causó indignación entre turistas y personas en redes sociales, luego de que un video publicado en las diferentes plataformas mostrara a un grupo de jinetes intentando decapitar a un gallo que se encontraba suspendido entre dos guaduas, en medio de la celebración.
El país mostró su rechazo tras la circulación de las imágenes, pues consideran que consigna un grave caso de maltrato animal durante las tradicionales fiestas de la vereda Chenche Asoleado, un evento que cada año reúne a residentes y turistas en torno a las festividades por San Juan y San Pedro.
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La grabación, que rápidamente se viralizó en plataformas digitales, muestra cómo se colocan dos guaduas sobre la vía, y sobre ellas un palo del que cuelga un gallo en una cuerda. Por debajo del animal, pasan jinetes a caballo que intentan arrancarle la cabeza mientras el animal revolotea intentando salvar su vida.
La difusión del video provocó una oleada de reacciones en la opinión pública, pues numerosos comentarios en redes sociales condenaron el acto. Otros, en contraste, defendieron la práctica como una tradición que forma parte de las festividades de la región tolimense. Esto demuestra el costumbres populares y la creciente sensibilidad social hacia el bienestar animal.
El video desató un debate más amplio sobre los límites de las tradiciones culturales en Colombia. En la grabación, se observa con claridad la estructura improvisada y cómo las personas disfrutan la escena, acompañada de gritos de emoción por parte de algunos asistentes, lo que fue descrito por personas en redes sociales como “impactante” y “cruel”.
La indignación no tardó en trasladarse a las autoridades locales y la Alcaldía de Purificación emitió un comunicado de prensa en el que expresó su rechazo absoluto al suceso: “Rechazamos de manera contundente el acto de maltrato animal que circula en video en redes sociales ocurrido presuntamente en el marco de las festividades de la vereda Chenche Asoleado”.
En el mismo pronunciamiento, la Alcaldía detalló que se comunicó con los responsables de la organización de las festividades, que negaron haber autorizado o promovido la actividad: “Nos hemos comunicado con el comité organizador quienes niegan toda la responsabilidad o autorización para este reprochable hecho”, se explicó en el comunicado, aclarando que la actividad no formaba parte del programa oficial de las fiestas, y que se trató de una acción aislada, presuntamente ejecutada por particulares sin consentimiento de las autoridades.
La administración municipal anunció además la adopción de medidas legales para identificar y sancionar a los responsables: “Se tomarán todas las medidas legales necesarias para dar con los responsables de este acto de barbarie”, puntualizó la administración.
El caso reavivó el debate sobre la persistencia de prácticas tradicionales que involucran animales en celebraciones populares, teniendo en cuenta que en varias regiones de Colombia, eventos como las corralejas, las peleas de gallos y otras actividades similares han sido objeto de controversia. Incluso, en algunos casos, se han adelantado acciones para tener prohibiciones parciales o totales.
La defensa de las costumbres locales suele enfrentarse a la presión de organizaciones animalistas y sectores de la sociedad que exigen la erradicación de cualquier forma de violencia contra los animales.
Hay alerta porque gran parte de la comunidad de Purificación defiende la actividad como parte de la identidad cultural de la región. En contraste, otros manifestaron su repudio y exigieron acciones concretas para evitar que hechos similares se repitan. El impacto del video ha trascendido las fronteras del municipio, generando debate en las diferentes plataformas digitales.
Ante la gravedad de la situación, los ciudadanos están a la espera de la respuesta institucional, con el anuncio de investigaciones y posibles sanciones, para evitar que se presenten casos de este tipo.