No paran las reacciones de rechazo en contra del asesinato de la mujer transgénero Sara Millerey, que perdió la vida luego de que sufriera una violenta golpiza con la que le fracturaron los brazos y las piernas, y luego la arrojaran a una quebrada, para que muriera ahogada, un despiadado acto que ocurrió el pasado fin de semana en el municipio de Bello, población del área metropolitana del Valle de Aburrá, en Antioquia.
Aunque a la víctima la alcanzaron a trasladar a un centro asistencial, finalmente falleció por la gravedad de las heridas que sufrió que le provocaron en un hecho que apunta a ser un crimen por transfobia.
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Por el impacto que generó el trágico deceso, reaccionó hasta del propio presidente de la República, Gustavo Petro, que expresó su rechazo en varias ocasiones desde su cuenta oficial en la red social X.
“El crimen en Bello. Eliminar violentamente la diferencia se llama fascismo [sic]”, publicó en la noche del lunes.
Y bajo ese mismo argumento, y con sus tradicionales diatribas, insistió en que ese señalado feminicidio se dio por la discriminación que se perpetra en el país que es similar, según él, a la del Nacional Socialismo en Alemania, durante la Segunda Guerra Mundial.
“Me critican que hable de nazismo. Se perfectamente que el fascismo es la eliminación violenta de las diferencias del ser humano: políticas, religiosas, étnicas, de libertad sexual. Esto que pasó en Bello se llama fascismo, porque hay Nazis en Colombia [sic]”, reiteró.
Además, conminó a las autoridades para que tengan celeridad en las indagaciones para esclarecer cómo se dio este infame asesinato: “Solicito a @PoliciaColombia la máxima dedicación para esclarecer este crimen brutal [sic]”.
Pedraza denuncia revictimización
Entre tanto, la representante a la Cámara Jennifer Pedraza sostuvo que hubo revictimización en la forma en que inicialmente se informó sobre ese crimen en la administración municipal, ya que anularon su identidad de género.
“A Sara la asesinaron brutalmente en Antioquia, y la Alcaldía de Bello la revictimiza negando que era una mujer trans. Esa misma violencia que niega su identidad es la que permite y perpetúa estos crímenes. Este país le falló en vida y ahora también en su muerte ¡Justicia para Sara! [sic]”, afirmó en su cuenta de X.
Pese a que no lo especificó, la congresista se estaría refiriendo a las declaraciones del secretario de Seguridad de esa población antioqueña, José Rolando Serrano, que no se refirió a la víctima como ella misma se reconocía, sino como aparecía en su documento de identificación.
No obstante, la alcaldesa de Bello, Lorena González, se refirió a ella de la manera que correspondía a su identidad de género, cuando ofreció una recompensa de 100 millones de pesos por información que permita dar con los asesinos.
Pedraza no fue la única que reprochó esa desafortunada referencia, también lo hizo el secretario General de la Alcaldía de Bogotá, Miguel Silva Moyano.
“La volvieron a matar cuando no la reconocieron como trans, cuando la negaron, cuando la invisibilizaron, cuando quisieron pretender que nunca existió. Que frustración [sic]”, criticó.
También rechazó el tratamiento que le dieron al caso, tanto en medios de comunicación, como en las redes sociales, donde se difundió el video de sus últimos instantes de vida en la quebrada a la que la arrojaron, luego que sufriera la brutal golpiza con la que le fracturaron sus extremidades.
“A Sara la mataron, por trans, sí por trans. Un crimen de odio porque a esta sociedad consumida por el machismo y la homofobia y la transfobia le sigue quedando grande el asunto de la dignidad humana. La volvieron a matar cuando la grababan mientras agonizaba sin que nadie hiciera nada [sic]”, señaló.