La Casa Blanca condenó el "horrible" ataque que perpetró un hombre vestido de Santa Claus contra un conocido local nocturno de Estambul durante las celebraciones de Año Nuevo, matando a al menos 39 personas e hiriendo a otras 69.
"Estados Unidos condena en los términos más fuertes este horrible ataque terrorista en una discoteca de Estambul, Turquía, que ha dejado decenas de muertos y heridos", declaró el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, Ned Price, en un comunicado.
Price también dijo que "los Estados Unidos envían sus condolencias a los familiares de los fallecidos" y reafirmó el apoyo de su país a Turquía, aliado en la OTAN, en la lucha contra el terrorismo.
En tanto el presidente Barack Obama se encuentra vacacionando en Hawai con su familia. Por el momento el portavoz Eric Schultz se mantiene informado del ataque.
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