Uruguay sufre escasez de combustible antes del inicio del paro de estaciones de servicio

Los uruguayos salieron masivamente este fin de semana a abastecerse de combustible de sus vehículos ante la perspectiva de una huelga de estaciones de servicio programada para el lunes y martes.

Los propietarios de los centros de dispendio protestan por una nueva política del gobierno de Tabaré Vázquez que afectaría sus márgenes de ganancia, al mantener los precios fijos establecidos por el gobierno pero habilitando a los distribuidores mayoristas a fijar su precio de venta. Por ello, decidieron suspender sus actividades por 48 horas.

En varios puntos del país se observaron durante el sábado largas filas de vehículos en las gasolineras en previsión de esta situación. Según declaró a El Observador el gerente de la Unión de Vendedores de Nafta de Uruguay (Unvenu), Federico De Castro, es probable que entre el domingo y el lunes haya quiebre de stock en varios puntos, un hecho que ya fue reportado por El País, citando a administradores de comercios locales.

Durante el sábado, circuló a las estaciones de la empresa estatal ANCAP una intimación del gerente general de la empresa, Jorge Horvath, indicando que el incumplimiento de abastecimiento "constituirá una violación de las obligaciones asumidas por vuestra empresa en el contrato de concesión".

Uruguay tiene un sistema monopólico de refinación, venta y fijación de precios de los combustibles en manos de ANCAP. El país importa el 100 por ciento del crudo que consume ya que no posee reservas hidrocarburíferas. Los precios de venta de gasolina son fijados en función del valor del barril de petróleo y del dólar, y es uno de los más caros de la región.

A valores actuales, un litro de gasolina súper (la de menor refinación) al público cuesta USD 1,49.

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