Un hombre de 38 años falleció el pasado viernes 23 de mayo en el hospital Purpan de Toulouse (Francia), una semana después de haberse golpeado en la cabeza al lanzarse a una piscina parcialmente cubierta, situada en una vivienda okupada del barrio Juncasse-Argoulets. El accidente se produjo el sábado 17 de mayo, según confirmaron fuentes judiciales.
Ese día, el hombre se encontraba en el interior de una casa okupada cuando decidió bañarse en la piscina del jardín. Sus acompañantes relataron a las autoridades que, tras lanzarse al agua, dejó de moverse. Alarmados por la situación, varios de ellos se arrojaron a la piscina para sacarlo. La víctima fue trasladada en estado grave al hospital, donde permaneció en coma hasta su fallecimiento.
Primeros resultados de la autopsia
La autopsia practicada en los días posteriores apunta a una muerte por ahogamiento, “a priori sin intervención de terceros”, según comunicó el Ministerio Fiscal de Toulouse. Sin embargo, se han solicitado análisis complementarios al forense responsable para determinar con mayor exactitud el origen de las lesiones que presentaba la víctima.
De acuerdo con la información facilitada por el fiscal de guardia, las personas que ayudaron a sacar al hombre del agua señalaron que su cabeza habría golpeado contra una de las esquinas del borde de la piscina al momento de lanzarse. El cuerpo presentaba marcas visibles en el rostro y se quiere descartar que estas lesiones hayan contribuido a la pérdida de conocimiento previa al ahogamiento.
Análisis adicionales y precaución judicial
A pesar de que los primeros indicios no apuntan a un acto violento, el Ministerio Fiscal ha optado por mantener la cautela en la calificación de los hechos. Se espera que los exámenes complementarios determinen si hubo otros factores médicos o mecánicos implicados en el accidente. No se descarta ninguna hipótesis hasta disponer del informe completo del legista.
La piscina estaba cubierta parcialmente por una lona, y las condiciones de seguridad del lugar están siendo también objeto de revisión. La vivienda donde tuvo lugar el accidente está okupada de forma irregular y no consta que tuviera habilitaciones legales ni mantenimiento adecuado de sus instalaciones.
La policía judicial continúa tomando declaración a los testigos del suceso para reconstruir con precisión los momentos previos al accidente. Hasta el momento, no se ha iniciado ninguna investigación por delito de homicidio ni se han formulado imputaciones.