Por las inspecciones para frenar al dólar, el microcentro se pareció a un operativo antiterrorista

El operativo conjunto de varios organismos públicos frenó la actividad cambiaria y contribuyó a la caída del "contado con liqui". La operatoria con bonos, acciones y divisas se mezcló con el inédito despliegue de inspectores, policías y gendarmes

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El megaoperativo contra una docena de sociedades de Bolsa y unas pocas casas de cambio, paralizó las operaciones cambiarias. La acción fue más espectacular que efectiva. No hubo detenidos ni situaciones enojosas. En la City hablaban del buen trato a pesar de los uniformes, las armas largas y los chalecos antibalas. Parecía que estaban rodeando a delincuentes adentro de un banco. Los "arbolitos" dejaron de vocear el cambio de monedas, para transformarse en espectadores de la acción que involucró desde la Anses hasta la Superintendencia de bancos, pasando por la Comisión de Valores y la Unidad de Información Financiera, escoltados por Gendarmería, Prefectura y Policía Federal. El microcentro se pareció a un operativo antiterrorista.

Por supuesto, las primeras operaciones que se congelaron fueron las cambiarias. El dólar libre cerró en 14,70 pesos, el precio con el que abrió, dos centavos por encima del día anterior. En esta suba influyó el hecho de que los bancos no vendieran dólares para ahorro al público por un problema en el sistema informático de la AFIP, según explicaron oficialmente. Se vio la influencia directa que tiene el abastecimiento oficial de billetes. Cada día se venden más de 30 millones de dólares al público que se vuelcan en parte al mercado marginal.

El "contado con liquidación" también se paralizó por el operativo. Se hicieron menos operaciones que de costumbre. La Bolsa sintió la ausencia de estos jugadores y llegó a estar más de 3,5 por ciento abajo pero sobre el final, el Merval, el promedio de las acciones líderes, cerró con una caída de 1,98 por ciento con negocios por 312 millones de pesos.

Edenor, uno de los papeles preferidos para hacer "contado con liqui", estuvo entre los más afectados y perdió 4,75 por ciento. En cambio, YPF, una acción que no la pasó bien las últimas ruedas, subió 2,40 por ciento.

El dólar "contado con liquidación", ante la falta de operaciones, tuvo un retroceso de 41 centavos, a 13,66 pesos.

Pese al default, los bonos en dólares tienen una renta tan alta que se volvieron atractivos

Los ADR's de las acciones argentinas en Wall Street, en cambio, tuvieron alzas porque anotaron operaciones hechas hace 72 horas. Por eso Irsa subió 2,99 por ciento y Grupo Galicia, 2,10 por ciento. YPF fue la sorpresa con un alza de 4,78 por ciento.

En tanto, en el Forex-MAE, la principal plaza mayorista de cambios, se negociaron 72 millones de dólares. Los exportadores siguieron ausentes y ahora el Gobierno piensa en lanzar un bono que los tiente a liquidar los dólares retenidos. La mesa de dinero del Banco Central, a todo esto, no intervino en la plaza.

El dólar en las casas de cambio tuvo un alza de un centavo a 8,54 pesos y el dólar "tarjeta" para los que viajan al exterior se ubicó en 11,53 pesos.

Las reservas subieron 17 millones a u$s27.320 millones a pesar de que se pagaron 89 millones por importaciones de energía, unos 7 millones a la Anses por jubilaciones pagadas en el exterior, otros 2,6 millones a Brasil por el SML, el sistema que compensa monedas en el intercambio comercial.

En la licitación de Letras del Banco Central (Lebac) hubo un éxito inesperado porque, a pesar de no subir las tasas de interés, se absorbieron 160 millones de pesos de la circulación debido a que lo que captaron fue superior a los vencimientos de la semana.

Los bonos continuaron con su recuperación a pesar de la prohibición del Banco Central de utilizarlos para hacer operaciones de contado con liquidación. Pero es tan elevada la renta y la percepción de que se negociará con los holdouts (inversores que no entraron al canje de la deuda), que se han convertido en un instrumento atractivo.

En el Mercado Abierto Elecdtrónico (MAE), los negocios sumaron 800 millones porque han quedado los clientes genuinos que no los utilizan para hacer "contado con liqui". El Boden 2015, uno de los bonos en dólares con legislación argentina que vence el 3 de octubre de 2015 subió 1,50 por ciento. El Bonar X que vence en 2017, lo acompañó con un alza de 1,38 por ciento. Ambos papeles tienen una tasa de retorno superior a 16 por ciento en dólares.

La rueda del miércoles se presenta complicada por el paro bancario. La falta de clearing va a dejar sin efectivo a muchos operadores. Pero bonos y acciones siguen siendo tentadores por las elevadas ganancias que están dando. La caída de la Bolsa atraerá a los cazadores de oportunidades.