La aerolínea estatal Pakistan International Airlines deja en tierra a 150 pilotos con licencias dudosas

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EFE/EPA/SHAHZAIB AKBER
EFE/EPA/SHAHZAIB AKBER

Islamabad, 25 jun (EFE).- La aerolínea estatal Pakistan International Airlines (PIA) dejará en tierra a 150 pilotos con licencias dudosas, después de que el Gobierno paquistaní anunciase que muchos pilotos del país tienen permisos de vuelo falsificados.
"Hemos decidido dejar en tierra a 150 pilotos", afirmó a Efe este jueves el portavoz de PIA, Abdullah Hafeez.
La fuente indicó que desde febrero de 2019 la Autoridad de Aviación Civil (CAA) paquistaní está llevando a cabo una investigación sobre licencias de pilotos falsas, y las licencias de esos 150 aviadores de la compañía están en entredicho.
"Tras la investigación, si las licencias (de los pilotos) son genuinas podrán seguir volando", dijo Hafeez, quien indicó que la compañía cuenta con 434 pilotos en total.
El anuncio de PIA llega después de que ayer el ministro de Aviación paquistaní, Ghulam Sarwar Khan, afirmase ante la Asamblea Nacional (NA, Cámara Baja) que casi el 40 % de los 860 pilotos de avión activos en Pakistán tienen licencias de vuelo falsas.
Mujtaba Baig, portavoz de la CAA, organización que lleva a cabo la investigación, rebajó hoy a un 30 % el número de pilotos paquistaníes activos que tienen licencias falsas, es decir unos 260.
El portavoz de PIA indicó a Efe que desconoce cómo es posible que un número tan alto de pilotos comerciales vuelen con licencias falsas.
"No sé como las consiguieron (las licencias), pero no ocurrió de un día para otro", afirmó Hafeez.
Pakistán sufre siniestros aéreos con cierta frecuencia. En 2010 vivió una de sus peores tragedias de aviación, cuando 152 personas murieron en el accidente de un avión cerca de Islamabad.
Dos años más tarde, otro accidente de aviación acabó con la vida de 138 personas cerca de la capital.
El último accidente ocurrió el pasado 22 de mayo cuando un A-320 de PIA se estrelló en una zona residencial cercana al aeropuerto de Karachi, en el sur de Pakistán, dejando 98 muertos y dos supervivientes.
La investigación preliminar del siniestro culpó a los controladores aéreos y sobre todo a los pilotos como los responsables, aunque indicó que los dos aviadores tenían "cualificaciones adecuadas y experiencia".