Detuvieron a disidentes cubanas para evitar un encuentro con el papa Francisco

Martha Beatriz Roque Cabello le confirmó a Infobae que ella, junto a otras dos personas fueron detenidas al salir de sus casas tras ser invitadas por la Nunciatura para saludar al Sumo Pontífice

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Martha Beatriz Roque Cabello, integrante del "Grupo de los 75" le confirmó a Infobae que ella, junto a Bertha Soler, líder de las Damas de Blanco, y Miriam Leiva, fueron detenidas para evitar que saluden e intercambien palabras con el papa Francisco luego de la invitación que les realizó la Nunciatura de Cuba.


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"Cada uno de nosotros, de forma aislada, habíamos tenido algún contacto con la Nunciatura Apostólica, y en el día de hoy, el secretario del Nuncio, Monseñor Veceslav, estuvo aquí en mi casa por la mañana y me dijo que podríamos saludar al papa a las 6 de la tarde en los jardines de la Nunciatura Apostólica, cuando se retirara", describió la disidente cubana nacida el 16 de mayo de 1945 en La Habana, quien fue la única mujer entre las personas arrestadas y condenadas en 2003 denominados el "Grupo de los 75".


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"Bertha Soler, Miriam Leiva, viuda de Oscar Manuel Espinosa Chepe, uno de los miembros del grupo de los 75, y yo, salimos cada una de nuestras casas, y las tres fuimos arrestadas en el momento que salimos de las viviendas", denunció Martha Beatriz Roque Cabello.


"Se nos prohibió saludar al papa", aseguró la disidente cubana

Explicó que tras el arresto "nos condujeron a diferentes unidades de la policía".


"Se nos prohibió saludar al papa", disparó la economista. "Se nos prohibió honrar la invitación que nos hicieron para poderlo saludar", remarcó.


Al consultarla acerca de esta posibilidad, ya que desde la Santa Sede habían informado que no se realizarían encuentros privados con disidentes, Martha le dijo a Infobae que "el Vaticano había dicho que no iban a haber entrevistas con los disidentes, pero esto era como una ronda de consuelo, que nos pudiera ver al menos en los jardines de la Nunciatura Apostólica para saludarlo, darle la mano, y tener la posibilidad de hablar o intercambiar alguna palabra con él".


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Por último, la disidente cubana reconoció que en caso de darse el encuentro con Francisco "yo le hubiera planteado que con el tiempo que llevo en la oposición siempre me he preocupado por el pueblo de Cuba, y en estos momentos la situación económica que hay en el país es muy difícil, la pobreza tan grande por la que está pasando el pueblo, no sólo una pobreza material, sino también espiritual, necesita un poco más de la misericordia de Dios, y por consiguiente le hubiera pedido como católica que soy, que de verdad derramase toda su misericordia sobre el pueblo cubano".


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