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Fiel a su estilo austero, el presidente de Uruguay, José Mujica, no festejará su 79º aniversario. Se limitará a participar –como asistente, no como orador ni protagonista– en la Marcha del Silencio, convocada para este martes en Montevideo en conmemoración de las víctimas de la dictadura militar. Pero aun así, miles de personas le enviaron sus saludos en las redes sociales.
El "Pepe", como se lo conoce popularmente y como lo llaman desde el comerciante que Mujica visita habitualmente para comprar la carne que consume hasta la presidente argentina, Cristina Fernández de Kirchner, no suele hacer nada especial para su cumpleaños.
Por ejemplo, hace tres años sorprendió a los comensales de un restaurante de la ciudad de Colonia, a 180 kilómetros de Montevideo, adonde llegó para almorzar con su esposa, la senadora Lucía Topolanski, según recuerda la agencia EFE.
Un 52 por ciento de los uruguayos aprueba su gestión. Cuando le quedan diez meses de mandato antes de "dedicar todas sus energías a enseñar a jóvenes de familias de bajos recursos el amor por la tierra", el respaldo a lo actuado por Mujica llega al 76% entre quienes se definen como votantes del FA.