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Ante la posibilidad de que los comerciantes no puedan cubrir la demanda de productos en este 2014, el empresariado solicitó al gobierno de Venezuela que tome medidas económicas urgentes. Entre otras, propone la revisión de la Ley contra Ilícitos Cambiarios y que se agilice el acceso a divisas para pequeños y medianos comerciantes, según informa el periódico El Nacional. También insiste en que se modifique la Ley Orgánica del Trabajo y el esquema de horario de jornadas laborales continuas.
Los comerciantes advierten que 2014 será un año difícil para atender la demanda de bienes y servicios por la falta de inventarios y productos. "Consecomercio ratifica que los primeros meses de 2014 serán difíciles para el sector terciario, tanto por la manera como fue conminado a liquidar parte importante de sus inventarios, como por la indisponibilidad de divisas para adquirir oportunamente en el exterior lo que no se produce en el mercado nacional. Y esa realidad tiene que revertirse por el hecho de que no podrá atender eficientemente la demanda de los consumidores ni generar las fuentes de trabajo que habitualmente mantiene", indica el gremio en un comunicado.
En ese sentido, el empresariado expuso la necesidad de que se revise la Ley de Costos y Precios Justos y se actualicen los precios congelados de los bienes que más escasean en el mercado. "Se debe instrumentar una política de Estado productiva primaria, manufacturera y comercial, a partir de incentivos a la modernización tecnológica, el mejoramiento de la productividad y la competitividad, para la atención eficiente del abastecimiento interno y la competencia internacional, privilegiando lo hecho en Venezuela por encima de lo importado", dice Consecomercio.
La escasez en Venezuela fue pronunciada en 2013, con largas filas en comercios y grandes dificultades para conseguir productos básicos, como alimentos, medicamentos e incluso papel higiénico. A esta situación, se sumó la galopante inflación, que cerró el año con un 56,2 por ciento. Ante esto, el presidente Nicolás Maduro emprendió una embestida contra la supuesta guerra económica declarada por los grupos empresarios en el país.
De esta forma, intervino comercios y locales de electrodomésticos y, haciendo uso de la Ley Habilitante que le aprobó la Asamblea Nacional en noviembre para que tome medidas sin necesidad de consultar al Poder Legislativo, impuso controles de precios y cárcel para aquellos comerciantes que remarcaran los valores de los productos por arriba de lo establecido por el Gobierno.
De acuerdo con el discurso de fin de año de Maduro, el año 2013 fue "difícil y complejo" para Venezuela, no sólo por la muerte del líder bolivariano Hugo Chávez, sino también por la crisis política y económica. No obstante, el mandatario auguró que 2014 será mejor.