Estos son los riesgos de consumir moringa

Es ampliamente benéfico para quienes padecen diabetes

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Además, este árbol se implementa para prevenir problemas cardiovasculares y para reducir el colesterol, entre otros.
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Además, este árbol se implementa para prevenir problemas cardiovasculares y para reducir el colesterol, entre otros. iStock

La moringa es un árbol originario de la India que suele consumirse para el tratamiento de la diabetes, ya que contiene sustancias anticancerígenas, hipotensoras, hipoglucemiantes y antibióticas. Además, ha sido estudiada desde hace varios años y se ha comprobado su aporte nutritivo.

De acuerdo al Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), la moringa contiene grandes cantidades de proteína, aceite, ácido ascórbico, compuestos estrogénicas, β-sitosterol, hierro, calcio, fósforo, cobre, vitaminas A, B y C, entre otros.

Gran parte de los beneficios que este árbol aporta a quienes lo consumen se deben a sus altas cantidades de compuestos fenólicos, por lo que también suele implementarse el uso de sus semillas para reducir la fiebre, proteger el hígado, contra las úlceras y como vasodilatador.

Los principales padecimientos en los que se implementa son:

  • Prevenir la osteoporosis, debido a que contiene grandes cantidades de calcio.
  • Brindar protección al sistema cardiovascular y para reducir la presión alta.
  • Como auxiliar en el tratamiento de la diabetes.
  • Reducir el colesterol.
  • Para combatir el insomnio.
  • Reducir la inflamación.
  • Para proteger al hígado y prevenir la aparición de úlceras, entre otros.

¿Cuáles son los riesgos de consumirla?

La moringa tiene amplios beneficios para quienes padecen diabetes. - (Imagen Ilustrativa Infobae)
La moringa tiene amplios beneficios para quienes padecen diabetes. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

De acuerdo a un estudio publicado en la revista Biotecnia de la Universidad de Sonora, el uso de la corteza de la moringa oleífera puede producir úlceras y pápulas en zonas delicadas como lo son ojos, piel del rostro y la tráquea, esto debido a que podría promover su aparición a causa de la acción vesicante que presenta.

Sin embargo, no se sabe con exactitud las cantidades necesarias para que la corteza no llegue a producir úlceras, por lo que se recomienda no usarla diariamente. Asimismo, esta parte del árbol suele usarse como infusión o hasta masticada para aliviar la irritación de la garganta y para combatir la gripe.

Además, el consumo del triturado - y en cualquiera de sus presentaciones- está contraindicado para mujeres embarazadas, ya que podría causar contracciones que desencadenan un aborto.

En otros estudios se recomienda no superar las dosis de 35 miligramos de triturado de moringa, ya que esto podría afectar los riñones, provocar taquicardia y hasta podría afectar al sistema nervioso central.

Por el contrario, el uso de las hojas de moringa son las que menos contraindicaciones tienen, ya que son la parte anatómica de la planta, por lo que son las más usadas para aliviar las molestias relacionadas con la diabetes, entre otras.

Además, en se recomienda que no se recomienda superar los 8 gramos de hojas por taza que se consuma.

Es por lo anterior que, de manera general, no se recomienda el uso en los siguientes sectores de la población:

  • Personas en tratamiento médico: la moringa podría causar efectos contraproducentes al combinarse con medicamentos, por lo que se corre el riesgo de padecer hipoglucemia o hipotensión.
  • Quienes padecen problemas de tiroides: ya que puede intervenir con la función tiroidea.
  • Si padecen hipoglucemia: quienes presentan bajos niveles de azúcar deben evitar su consumo ya que podría disminuir aún más el azúcar en sangre.
  • Si padecen hipotensión: el consumo de moringa puede disminuir la presión arterial.
  • Mujeres embarazadas: ya que puede inducir un aborto.

¿Cuál es la manera en la que se puede consumir?

(Getty Images)
(Getty Images)

La manera común es en infusiones, en la cual se deben hervir las hojas con agua y prepararse en forma de té para obtener su beneficios. Este tipo de consumo suele utilizarse para evitar dolor en las articulaciones y aumentar la serotonina.

Otra de las maneras en las que se puede consumir es en suplementos, ya sea en forma de pastillas o de polvo, los cuales pueden incluirse en diferentes preparaciones como jugos, licuados o también para preparar té.

Por último, también existe el aceite de moringa, el cual se extrae de las semillas y puede ser utilizado en ensaladas como aderezo. Este aceite tiene propiedades antiedad, antinflamatorias, reduce grasas malas y contiene omega 3.

Es importante señalar que la moringa es ampliamente estudiada debido a que ofrece una gran cantidad de beneficios, los cuales han sido comprobados en muchos de ellos, por lo que les recomendamos implementarla en su dieta pero, eso sí, consultando a su médico con anticipación.