CDMX: activan alerta amarilla por temperaturas de hasta 30 grados para este viernes santo

El calor continuará afectando a los habitantes de la Ciudad de México durante la tarde del viernes 29 de marzo, cuando se espera que la temperatura alcance hasta 30 grados Celsius.

Situación por la que la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) activó alerta amarilla en 12 alcaldías de la capital.

Por medio de su cuenta de X (@SGIRPC_CDMX), la dependencia indicó que se trata de las demarcaciones:

Álvaro Obregón

Azcapotzalco

Benito Juárez

Coyoacán

Cuauhtémoc

Gustavo A. Madero

Iztacalco

Iztapalapa

Miguel Hidalgo

Tláhuac

Venustiano Carranza

Xochimilco

Para estos lugares, Protección Civil capitalina pronosticó temperaturas de entre 28 a 30 grados Celsius a partir de las 14:00 hasta las 17:00 horas del viernes.

Tras lo anterior, enlistó una serie de recomendaciones con la finalidad de proteger la salud. Entre estas están:

• Uso de bloqueador solar
• Procurar no exponerse por tiempo prolongado al sol
• Vestir ropa de colores claros, utilizar gafas de sol, sombrero y/o gorra
• Evitar comer en la vía pública, ya que los alimentos se descomponen rápidamente
• Mantenerse hidratado todo el día

A estas se suman las propuestas por la Secretaría de Salud que son:

• No realizar actividades intensas bajo los rayos solares
• Procurar permanecer en lugares frescos, a la sombre y ventilados
• Ventilar el automóvil antes de abordar
• Lavar las manos frecuentemente con agua y jabón antes de comer, preparar y servir alimentos, y después de ir al baño
• Evitar realizar ejercicio o actividad intensa entre las 11:00 a 15:00 horas al aire libre
• Durante este periodo los adultos mayores deben permanecer en casa
• No realizar deporte o caminatas extremas estando solo, siempre hacerlo con la compañía de alguien más
• Consumir comida ligera y fresca, de ser posible alimentos vegetales naturales crudos, como ensaladas, frutas y verduras

Esto debido a que las elevadas temperaturas pueden afectar la salud e incluso provocar un golpe de calor.

Este se caracteriza por una súbita elevación de la temperatura corporal debido a la prolongada exposición al calor ambiental y puede ocasionar desde deshidratación hasta riesgos de daños neurológicos y mortalidad.

Los daños se presentan especialmente en grupos vulnerables como mayores de 60 años, niños menores de cinco años, personas con discapacidad o enfermedades crónicas y turistas no aclimatados.

Lo anterior lo indicó la Secretaría de Salud en su documento “Medidas preventivas de golpe de calor”, publicado en abril de 2014.

En este explicó que el cuerpo humano, que funciona a una temperatura de 37 grados Celsius, dispone de mecanismos como la sudoración para regular su calor interno.

Sin embargo, durante un golpe de calor, estos mecanismos pueden fallar, provocando un aumento crítico de la temperatura interna y una severa pérdida de líquidos y sales esenciales para el organismo.

Entre los síntomas más alarmantes del golpe de calor se encuentran el mareo, la confusión, la desorientación, un aumento del ritmo cardíaco, la ausencia de sudoración pese a la exposición al calor y una temperatura corporal que puede superar los 39.4 grados Celsius.

Finalmente, indicó que ante este problema pueden aplicarse algunas medidas con la finalidad de evitar consecuencias mayores. Para ello, primero deberá llevarse a la persona a un sitio fresco y colocarle los pies en alto.

Mientras se espera la ayuda de personal especializado, se deberá quitarle la ropa e intentar disminuir la temperatura corporal con tela mojada o hielo en las axilas o ingles. Si es posible moverla a zonas con aire acondicionado o ventilador.

En caso de que la persona tenga una temperatura superior a 40 grados Celsius, la dependencia recomendó a bañarla con agua fría hasta que su temperatura disminuya.