Lo que se sabe del caso de Kerly Cuevas, niña de 8 años que fue asesinada en Girón

Un nuevo hecho de violencia y feminicidio tiene consternado al país, pues la niña de 8 años llamada Kerly Cuevas, que había sido reportada como desaparecida, fue raptada y asesinada en Girón, Santander. Una pequeña venezolana que, según confirmó Noticias Caracol, se encontraba bajo el cuidado de una vecina [pareja del sospechoso] y estaba jugando con varios amigos del barrio minutos antes de que todo sucediera.

“Ella es amiga mía desde Venezuela. Vivíamos en el mismo barrio. Ella migró primero que yo, y fue la persona que me animó a venir a este país. Por eso, yo conocí a ese señor que me arrendó la pieza de la casa en el Rincón de Girón”, explicó Kely Materán, la madre de la menor.

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De acuerdo con las imágenes que registró una cámara de seguridad, antes de que le fuera hurtada su vida a la menor, fue vista caminando con un hombre adulto. Lo que permitió que las autoridades iniciaran su búsqueda partiendo de esa pieza clave.

Se trata de Alirio Gualdrón, de 59 años, y pareja de la mujer que estaba a cargo de la pequeña Cuevas. El hombre fue enviado a la cárcel bajo la acusación de participar en la desaparición y muerte de Kerly Cuevas.

El cuerpo de la menor de 8 años fue encontrado detrás de la estación de Metrolínea en el municipio de Girón, Santander, el miércoles 1 de mayo por el Ejército, luego de que Gualdrón la hubiera llevado hacia una zona boscosa, según se pudo confirmar a través de la contundente evidencia.

Esto, porque en esas pruebas que fueron presentadas en la audiencia de la Fiscalía General de la Nación, se incluyeron imágenes de vigilancia y también se encontraron inconsistencias en el testimonio del sospechoso.

Aunque aún no se conocen las causas de la muerte de Kerly Cuevas y tampoco se ha precisado si fue víctima de abuso sexual, el medio mencionado conoció que los investigadores encontraron rastros de violencia en la cabeza de la niña con un objeto contundente.

Además, que el hombre ocultó información crucial sobre el paradero de la menor tanto a la familia como a las autoridades, ya que la madre de la víctima reveló que le pidió ayuda en su momento para ir a buscarla, pero él no dijo nada.

El hombre fue capturado y llevado a Medicina Legal mientras se da la audiencia de garantías. Por el momento no ha confesado que haya cometido el crimen y tampoco ha dicho que fue lo que pasó con la niña.

Los vecinos del barrio donde vivía la pequeña junto a su mamá exigen justicia y que las autoridades hagan las investigaciones correspondientes para que el culpable pague por el atroz crimen.

Por su parte, el alcalde de Girón, Santander, Campo Elías Ramírez, salió a hablar y mostrar sus condolencias con la mamá de la menor de 8 años, indicando que por las labores que la mujer realiza tenía que dejar a Kerly Cuevas al cuidado de su vecina y terminó con este horrible hecho.

Pero también aprovechó para enviar un mensaje dadas las circunstancias y les pidió a los padres de familia que estén más pendientes de los niños y que sepan en manos de quien los dejan.

El principal sospechoso de haber raptado y asesinato a la menor venezolana, Kerly Cuevas, es un hombre que vivía en la misma casa de la niña.

Alirio Gualdrón, es oriundo de Aratoca, Santander, y había arrendado la vivienda para subarrendar habitaciones, como en la que vivían Kerly y su mamá desde hace un año y medio.

La comunidad estuvo presente cuando el sospechoso fue capturado y entre gritos e insultos pedían que fuera procesado como corresponde, pues esperan que se haga justicia.

“Es un desgraciado. No es un ser humano porque a esto no se le puede llamar ser humano”, dijo una vecina del lugar llamada Naislet Rodríguez, en diálogo con Noticias Caracol.