Salió de un billar a contestar una llamada y recibió dos disparos: se trataría de un ajuste de cuentas

El atentado aparenta ser un ajuste de cuentas relacionado con un incidente previo sucedido en el municipio de Galapa, Atlántico, de acuerdo con el informe de las autoridades

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Un hombre fue sorprendido por los disparos de unos presuntos sicarios en la puerta de un bar de Barranquilla crédito - Getty y @elespectador/X
Un hombre fue sorprendido por los disparos de unos presuntos sicarios en la puerta de un bar de Barranquilla crédito - Getty y @elespectador/X

En la noche del domingo 28 de abril, aproximadamente a las 10 de la noche, en el barrio El Bosque, de Barranquilla, Ovidio de Jesús García Herrera, de 33 años, fue víctima de un ataque armado que lo dejó gravemente herido.

Los hechos sucedieron afuera del billar El Rey Arturo, de la capital del Atlántico, después de que García Herrera saliera del establecimiento para atender una llamada telefónica.

Según informó la Policía Metropolitana, dos individuos a bordo de una motocicleta abrieron fuego contra él, y lo impactaron en el tórax y el brazo derecho sin mediar palabras.

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Este incidente, según lo que publicó el medio regional El Heraldo, aparenta ser un ajuste de cuentas relacionado con un incidente previo sucedido en el municipio de Galapa, de acuerdo con el informe provisto por las autoridades. En dicho episodio, al parecer, otro hombre resultó herido, y a García Herrera se le vinculó con los hechos.

Tras el ataque reciente, los agresores se dieron a la fuga, mientras que la víctima fue trasladada a un centro asistencial de la ciudad para recibir la asistencia médica necesaria debido a las heridas de bala recibidas en su tórax posterior, tórax anterior y brazo derecho, según las declaraciones de los uniformados que atendieron el ataque con arma de fuego.

El evento forma parte de una serie de atentados violentos registrados en el barrio El Bosque, sumándose a ataques previos que dejaron víctimas mortales y heridas en circunstancias similares. La violencia, que parece recrudecer en esta zona de Barranquilla, ha puesto en alerta a las autoridades locales, que intentan frenar la ola delictiva que afecta la seguridad y tranquilidad de sus habitantes.

Un sicario de 15 años fue capturado en Barranquilla

En un operativo de la Policía Metropolitana de la capital del Atlántico, se logró captura de un joven de 15 años, conocido en el bajo mundo como Jhon Deivis o alias JD, señalado de cometer al menos ocho homicidios entre el último trimestre de 2023 y el primer de 2024.

Este adolescente, quien había evadido en seis ocasiones anteriores a la justicia, no pudo escapar esta vez gracias a la vigilancia aérea proporcionada por drones operados por la Policía, lo cual permitió su localización y detención en el barrio San Martín.

Además de los recientes homicidios atribuidos a JD, el joven ya enfrentaba investigaciones por tentativa de homicidio y porte ilegal de armas, lo que había derivado en una orden de aprehensión en su contra. Las autoridades detallaron que “en el desarrollo de las indagaciones contra este joven también se pudo recopilar información que lo vincularía con por lo menos ocho casos de homicidios ocurridos en los últimos seis meses en la capital del Atlántico”.

Sicariato en Barranquilla

El creciente número de episodios violentos en Barranquilla y los municipios aledaños revela un desafío significativo para las autoridades locales y nacionales que buscan frenar la delincuencia. La comunidad, impactada por los recientes hechos, demanda acciones más efectivas y una mayor presencia policial que puedan garantizar su seguridad en el día a día.

Otro episodio de este tipo de violencia, resultó en dos hombres asesinados a tiros en el barrio Santa Ana de Barranquilla durante la tarde del martes 23 de abril de 2024. La comunidad del norte de la capital del Atlántico fue testigo del terror desatado por un ataque sicarial en una de sus calles más transitadas. Los fallecidos, identificados como Jesús Salvador Perozo Perozo, de 39 años, y Yeico Urueta Núñez, de 28, perdieron la vida tras ser atendidos en la Clínica General del Norte debido a las heridas provocadas por el ataque.

El trágico incidente tuvo lugar en un momento donde los residentes del área se encuentran cada vez más preocupados por la escalada de violencia que afecta a Barranquilla y sus alrededores. Testigos del ataque reportaron que más de 15 disparos rompieron la tranquilidad del sector, provocando pánico y caos entre los presentes.22