Bruxismo: el estrés bucal que daña los dientes

Se encuentra asociado a tensiones emocionales. Su característica es la de rechinar o apretar los dientes durante la noche. Las consecuencias son dolores, sensibilidad y hasta pérdida de piezas

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El bruxismo afecta al 40% de la población (Getty Images)
El bruxismo afecta al 40% de la población (Getty Images)

Hoy más que nunca, el modo de vida tiene influencia directa sobre el organismo. Refiriéndonos a los problemas bucales, uno de ellos –cada día más común– es el bruxismo, producto de una excitación del sistema nervioso central que produce una hiperactividad muscular.

Son precisamente los músculos los encargados de generar fuerzas que sobrecargan al sistema bucal. Estas fuerzas pueden producir alteraciones musculares, articulares y también el masivo desgaste de dientes.

El prestigioso odontólogo y profesor Gustavo Vernazza explicó que el 40% de la población sufre este mal que también incluye a los niños. Este hábito inconsciente e involuntario de apretar o rechinar los dientes atenta contra la estética. Este trastorno del sistema de masticación es una causa importante de desgaste en las piezas, rotura y astillado e incluso puede llegar a causar otros dolores.

Una de las indicaciones para el bruxismo es el uso nocturo de placas
Una de las indicaciones para el bruxismo es el uso nocturo de placas

Existen diferentes grados de afección, pero los factores biosociales son la principal causa, como la edad, el tabaco, la ingesta de alcohol, la ansiedad, la cafeína, trastornos psiquiátricos y trastornos del sueño. A su vez, los temas posturales que se implementan al utilizar la computadora o el smartphone también tienen incidencia directa.

En el caso puntual de los menores, los períodos de ansiedad generados por los juegos de consola "comprometen y disminuyen la separación de dientes", resaltó el especialista.

Los síntomas son los siguientes:

-Dolor en la articulación temporomandibular
-Dolores musculares o de oído
-Sensibilidad al frío y al calor
-Rechinamiento de los dientes y ruidos nocturnos
-Desgastes de piezas dentarias
-Retracciones gingivales (encías)
-Socavados en los cuellos dentarios
-Fracturas dentarias

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