Cada vez resulta más común ver películas que obtienen su versión en serie. El Exorcista es una de ellas. El filme, estrenado en 1973, fue un éxito absoluto de taquilla a nivel mundial.
Hasta el momento el género de terror no había abordado tan directamente-y de manera tan cruda-el tema de los exorcismos. El diablo y la iglesia, o la fe del otro lado, se convirtieron en un combo que atrajo a todos los espectadores amantes del género.
Ahora llegó la versión para televisión, El exorcista, que emite FX todos los viernes a las 23. Esta vez la serie está ambientada en la actualidad en un pueblo estadounidense donde unas pocas familias asisten a misa regularmente los domingos. El sacerdote a cargo de este puñado de feligreses es un cura de origen latino, interpretado por el actor mexicano Alfonso Herrera.
Él será el que entrará en contacto con una familia un tanto disfuncional: un padre con demencia, una hija recluida en su cuarto luego de que muriera su amiga en un accidente de auto en el que ella manejaba, una madre preocupada por su familia (Genna Davis, un tanto desconocida por sus excesivas cirugías plásticas), y la hija menor que será víctima del diablo.
La clave de la serie es sentir el "revival", ya que la primera escena vemos a un cura con su gorro (símil al del padre Karras), la misma cortina musical aterradora, palabras en lenguas desconocidas y niños poseídos.
Es una serie para ver acompañado, de día y, en lo posible, ¡con las luces prendidas!
Por María Eugenia Capelo