La desgarradora historia de una participante de Masterchef: “Ella se llevó gran parte de mi alma”

La mujer, que trabaja como empleada doméstica y los fines de semana prepara productos dulces para vender, recordó una dolorosa pérdida y contó cuál fue el motor para seguir adelante

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La desgarradora historia de una participante de Masterchef: “Ella se llevó gran parte de mi alma” (Video: Telefe)

Este martes tuvo lugar la segunda jornada de audiciones de Masterchef, en las que los participantes presentan su mejor receta con la intención de que el jurado -compuesto por Damián Betular, Donato De Santis y Germán Martitegui- le entregue el delantal blanco para entrar a esta nueva edición del reality conducido por Wanda Nara. Fueron más de 10.000 los postulantes y después de una primera selección, ahora los jurados deberán definir quiénes serán los 24 que pasarán a la siguiente fase.

Tras ese nuevo filtro, de los 24 quedarán solo 16, que continuarán en el ciclo que volvió a su formato de cocineros amateurs, lejos de lo que fueron las últimas ediciones en la Argentina que contaban con la participación de famosos. Y sin dudas que el público eso es lo que quería teniendo en cuenta los números del rating, que marcaron picos de hasta 25 puntos en estas primeras dos ediciones.

Una de las historias que se destacó en la emisión de este martes fue la de Gabriela, que tras el saludo de los jurados, explicó que su carta de presentación serían una albóndigas con puré “de mi abuela, creo que no van a tener el mismo sabor, pero son las que ella nos preparaba”, aclaró.

Nacida en Córdoba capital, la mujer de 44 años es empleada doméstica, además de preparar productos dulces para vender los fines de semana: “Me motiva mucho hacerlo, no lo hago por el precio, lo hago porque me gusta. La cocina para mí lo es todo, es mi cable a tierra, es donde descargo si tengo ganas de llorar o de reír”.

Consultada por Martitegui respecto de qué la impulsó a presentarse en el ciclo, la participante afirmó que fue su hija mayor quien la convenció: “Siempre me vio con mucha pasión, y en un momento muy triste de mi vida esa pasión se me fue”. El jurado en ese instante consultó si era posible sabe por qué había perdido la pasión, y la respuesta de la cocinera dejó a todos sin palabras: “Perdí la pasión porque perdí una hija”.

Las albóndigas con puré presentadas por Gabriela ante el jurado
Las albóndigas con puré presentadas por Gabriela ante el jurado

“Perdí a mi hija María Lucía y con ella se fue toda mi felicidad y toda mi alegría. Calculo que a muchos que han pedido un hijo les ha pasado lo mismo. Pero bueno, ella se llevó gran parte de mi alma y necesito recuperarla”, continuó entre lágrimas. “Así que mi hija me obligó, prácticamente, a estar acá así que se lo agradecí porque todas las instancias que pasé hasta este momento fueron muy agradables y creo que con esto yo ya estoy más que satisfecha”.

Con un jurado atento y emocionado escuchando el relato, la participante continuó: “Mi corazón y mi sonrisa creo que están en mi vida de nuevo, así que les agradezco y espero que les gusten. No tengo competencia con mi abuela, les digo, pero lo hice con mucho amor”. Y dejó emplatada la preparación a la espera de las devoluciones.

El primero en acercase a la estación de trabajo fue Martitegui, quien se mantuvo en silencio, al igual que Donato. Por su parte, Betular intentó ahondar más en la preparación, consultando si las albóndigas incluían entre sus ingredientes el pan mojado. Ante ello, la cocinera afirmó que solo contenían carne, ajo, perejil, pimienta y sal.

Llegada la hora de definirse si Gabriela estaba en condiciones de ser parte de los 24 seleccionados, el primer chef en recibirla explicó: “Te la voy a hacer corta: son una bomba las albóndigas, el puré, todo es espectacular, está riquísimo, me lo llevaría todo a casa. Tenés un sí”.

Donato, en tanto, expresó: “Un plato así pone realmente el alma feliz. Es hogar, es familia, es tradición también”. Así, al conseguir dos votos positivos sobre tres jurados, la mujer logró el objetivo de pasar a la siguiente fase, pero Betular igualmente brindó una devolución: “Sos el fiel reflejo de que este oficio que tanto amamos los tres, y un montón de personas, sana y nos da alegría para seguir día a día. Así que te voy a dar el delantal que quiere decir que estás en la próxima etapa, para que lo disfrutes. Ahora todo es alegría”, dijo el pastelero para luego fundirse en un conmovedor abrazo con Gabriela y sus colegas jurados.

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