Los trucos de la banda de ladrones boqueteros que robó más de $2 millones en baterías de autos

Una comerciante de San Martín denunció a la Justicia cómo un grupo de delincuentes abrió una de sus paredes para llevarse 246 partes de su depósito, un lote de más de 3 toneladas de peso. Hay siete detenidos tras un operativo de Policía Federal, uno de ellos con un largo prontuario

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Pila-pila: parte del botín incautado.
Pila-pila: parte del botín incautado.

El último 25 de mayo, una abogada y empresaria se presentó en la Justicia de San Martín, aseguró que en un depósito de su zona un grupo de hombres desconocidos llegó en plena noche para llevarse un cargamento de gran porte: 246 baterías de auto de alto rendimiento y de diversas marcas, más de 3 toneladas de peso, con un promedio de 15 kilos por batería. El precio de venta final: más de 2 millones y medio de pesos.

Así, el caso llegó a la UFI N°10 de la jurisdicción con el fiscal Miguel Guozden, que encargo tareas a la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA, con el Juzgado de Rogatorias a cargo de María Gabriela Lanz.

Los detectives de la Unidad Federal de Investigaciones Especiales cruzaron imágenes de domos municipales, cámaras privadas, se intervinieron once líneas telefónicas. La mecánica del grupo era atrevida, pero clásica: tomaron el control de una propiedad lindera para abrir su boquete en la pared y luego llevar las baterías en tres pallets a un punto de enfriamiento, un piso como se dice en la jerga de los piratas del asfalto, para que la mercadería salga de circulación. Luego, las baterías encontraban su camino: talleres y locales de repuestos en zonas como Villa Maipú, Pablo Podestá, una concesionaria de usados en Villa Devoto.

La mercadería, al menos parte de ella, fue recuperada. La semana pasada, la Federal allanó 18 puntos para llevarse a siete detenidos, entre ellos los dos supuestos jefes de la banda.

Uno de los detenidos del caso.
Uno de los detenidos del caso.

Aníbal Leonardo F. y Christian Ricardo D., de acuerdo a información de la causa a la que accedió Infobae, fueron sindicados como los supuestos cabecillas e instigadores de la maniobra. El primero, curiosamente, cobra el bono IFE del ANSES según sus registros, con un pago acreditado para este mes. Domínguez, de 41 años, fue allanado y detenido en Caseros con tres teléfonos celulares.

Los dos tenían antecedentes: Aníbal Leonardo, arrestado en Villa Ballester, registraba una captura previa a cargo de un juzgado de San Martín por el delito de robo a mano armada. Domínguez tenía tres pedidos de captura de magistrados porteños y del conurbano bonaerense, por robo y por infracción a la ley de drogas.

Otros cuatro fueron acusados de ser la mano de obra activa para ejecutar el golpe, con ordenes recibidas por teléfono: uno de ellos, un hombre de 47 años detenido en Fuerte Apache, ya tenía dos causas previas por piratería del asfalto. Casi 80 baterías con marcas como Moura, Clorex o Edna, fueron encontradas en un pequeño local de Villa Maipú.

Dos hermanos con locales en Pablo Podestá y Loma Hermosa cayeron también: todos los comerciantes fueron acusados como partícipes necesarios. Enfriar la mercadería no era solo un eufemismo: uno de ellos tenía diez baterías en una heladera.

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