"La trampa de la alarma": la inédita modalidad con la que le robaron a una mujer

Las imágenes difundidas por el comercio exhiben un hecho insólito. Una mujer, a bordo de su camioneta, estacionó frente a una peluquería ubicada en Canning, Ezeiza, a las 17.46. Dos minutos y medio más tarde, sin romper ningún vidrio y mientras ella se encontraba comprando, un delincuente -con la complicidad de tres más- le quitó sus pertenencias del vehículo bajo una modalidad inusual.

"Tardé en bajarme porque estaba acomodando cosas del auto", expresó la víctima en el mismo video que se difundió y viralizó en las redes sociales. En las imágenes, luego de que la mujer estacionara su camioneta, un Volkswagen Bora se acercó detrás a la espera de que ella descendiera.

Cuando bajó del automóvil, uno de los ladrones abrió rápidamente una puerta trasera y, al volver a cerrarla, dejó un pequeño espacio para lograr abrirla nuevamente.

La mujer puso la alarma para activar el cierre centralizado pero no escuchó el ruido. Volvió a quitarla y a colocarla nuevamente. Como no escuchó ningún sonido, comprobó manualmente que la puerta estaba bien cerrada.

"Me abrió la puerta. Cuando yo bajé del otro lado destrabó la puerta. Cuando cerré, esa quedó abierta. La mía no porque yo cerré. Me sacó cosas de atrás y de adelante. Envolvió todo en la campera y chau", indicó la damnificada mientras veía la filmación.

El negocio, ubicado en Mariano Castex al 1700, es uno de los más concurridos de la zona, aledaña junto a otros comercios que se ubican sobre la misma vereda y a lo largo de la avenida.

Todo quedó grabado por las cámaras de seguridad de la panadería que se encuentra al lado de la peluquería. Allí se ve claramente el accionar de los ladrones.

La víctima realizó la denuncia en la comisaría 6ta de Canning, en donde investigan el caso, que sorprendió a los mismos efectivos policiales, ya que consideraron "poco habitual" este modus operandi. Según deslizaron desde la Policía, es muy poco habitual, y generalmente se atribuye a una "avivada" del delincuente sumado a un descuido de la víctima del robo.

La paradoja ocurrió sobre el final. A las 17.48, cuando los delincuentes tenían varios objetos de valor de la víctima y se retiraban del lugar, un móvil de la policía bonaerense que patrullaba la zona les pasó por al lado y estacionó detrás de la camioneta de la mujer.

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