Posiblemente el preso más comprometido de los cuatro que se fugaron el domingo de la Comisaría 2° de San Martín decidió entregarse hoy ante la Justicia y declaró haber tomado tal decisión al sentirse amenazado por sus compañeros de la celda.
Se trata de Carlos Emanuel Ortiz, quien está acusado por el homicidio del zapatero Eduardo Herrlein en el centro de Villa Ballester, el 13 de junio. El joven de 18 años se presentó hoy en los Tribunales de San Martín junto a su abogado Julio Borno y ya quedó a disposición de la Justicia.
"Me entregué porque quiero hacer las cosas bien. Quiero que se haga justicia y que se haga lo necesario para que salga todo bien", afirmó Ortiz ante las cámaras de C5N, poco antes de ser detenido nuevamente.
El joven aseguró que tomó la decisión de la fuga después de sentirse amenazado por sus compañeros de celda. Aún así, ni él ni su abogado pudieron explicar cómo un grupo de cinco detenidos sí pudieron permanecer en el calabozo mientras el resto de los presos se escapaba.
En la celda de la Comisaría 2°, ubicada en Villa Ballester, había 12 presos, de los que se escaparon en su momento siete.
"Tenía bastante miedo. No sabía qué hacer. Por miedo a los demás, tuve que decir que sí. Me tuve que escapar. Tuve que decir que sí y me tuve que escapar. Estaba bastante nervioso, tenía el corazón en la boca", relató Ortiz, segundos antes de que dos efectivos policiales lo detuvieran.
La entrega de Ortiz formó parte de una estrategia de su abogado defensor, quien busca alivianar su situación procesal de cara al inicio de su causa por supuesto homicidio.
"Era lo más conveniente y lo mejor para su situación procesal. Él estaba en la casa de unos amigos y yo pacté la entrega con su madre. Le expliqué el cuadro de situación a su madre y después de unas horas, ella me llamó para coordinar la entrega", afirmó Julio Bordo.
En tanto, el letrado hizo referencia también a la causa que lo encuentra a Ortiz como el principal sospechoso de haber asesinado al zapatero Herrlein.
Bordo especificó que, de acuerdo a las palabras de su defendido, el joven estaba en el lugar junto a los responsables del homicidio del comerciante pero no fue el autor del hecho.
"Todavía no declaró. Allí se sabrán más detalles. Pero, por ahora, lo único que me dijo es que estuvo en el momento del hecho pero no fue el ejecutor", añadió Bordo.
Sólo quedan dos prófugos
La decisión de Ortiz ante la Justicia de San Martín significó la segunda entrega de uno de los cuatro presos que todavía estaban prófugos.
Durante la madrugada, Pedro Sayes había sido recapturado durante un importante operativo de la Policía Bonaerense.
Así, los únicos dos presos que aún se mantienen prófugos son Jesús Leandro López, imputado por la Fiscalía 2° por robo agravado, y Fabián Sorrentino, acusado de infringir la Ley 27.7237 de drogas.
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