28 días de vida tiene Isabel. Nació el 15 de junio a través de una cesárea de urgencia, luego de 30 semanas de gestación. Pesó apenas 1700 kilos. Hoy, ya pesa el doble.
Ni bien salió de la panza de su madre, Valeria Centurión (33) vecina de Santiago del Estero, la beba debió ser derivada a al sector de Neonatología del Hospital Regional Carrillo. No pudo ir a los brazos de su mamá, ya que esta estaba conectada al respirador artificial en un coma inducido luchando para ganarle al Covid-19.
Valeria es madre de tres otros niños varones y está en pareja con David Centurión desde hace una década. Durante la pandemia toda la familia respeto los protocolos sanitarios para no enfermarse, pero el virus se coló. Atravesaron el COVID-19 con síntomas leves. Sin embargo, como ella estaba embarazada su situación fue más que delicada.
Todo ocurrió muy rápido. El 9 de junio pasado, mientras cursaba el último trimestre del embarazo, a Valeria debieron ingresarla de urgencia en en el Hospital Regional Carrillo tras el diagnóstico de una neumonía bilateral avanzada.
A la semana de su ingreso al nosocomio, su salud empeoró, y los médicos decidieron conectarla a un respirador para salvarle la vida. Ese mismo día, en una decisión atinada, decidieron practicarle la cesárea. Así nació Isabel. De no hacerlo, la vida de ambas hubiera corrido peligro.
La beba nació sin problemas de salud, a pesar de hacerlo antes de tiempo. Estuvo al cuidado del personal de neonatología, de su abuela materna y de su padre. Del otro lado, sola en una habitación de terapia intensiva, Valeria seguía luchando, y logró salir adelante.
En total estuvo 14 días en coma en la unidad de urgencia, supervisada por un equipo de especialistas, y otros 11 en terapia intensiva. Finalmente, las últimos tres jornadas las pasó en una sala común, para completar una óptima recuperación.
Hasta hace una semana, Valeria no sabía que había dado a luz, y es muy poco lo que recuerda de lo sucedido durante los días que permaneció internada. Fue su marido quien le comunicó que Isabel había llegado al mundo. Y hace apenas tres días ocurrió el encuentro más esperado: madre e hija estaban juntas.
Frente a la emoción del encuentro, el personal médico del hospital Carrillo grabó el momento en el que Valeria conoce a su beba. Un video que se hizo viral en las redes y emocionó a más de uno.
Desde el 7 de julio fueron dadas de alta hospitalaria, y están en su casa en Villa Robles junto a sus otros hermanos, que también se reencontraron con su madre y su nueva hermanita.
Ni los especialistas pueden creer la milagrosa recuperación de Valeria, que no bajó los brazos. Ahora tendrá que seguir con la rehabilitación en su hogar, ya que aún tiene disfonía y debe recuperar la masa muscular que perdió durante su prolongada internación.
La doctora Vanesa Heredia, que coordina el servicio de maternidad del Hospital Carrillo, informó que en Santiago del Estero hay alrededor de 350 embarazadas que son COVID-19 positivo. La provincia cuenta con un total de 66.324 contagiados y 857 fallecidos por la enfermedad.
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