Video: fuerte choque en Ramos Mejía tras el brindis de Año Nuevo

Tras los festejos y el brindis por la llegada del Año Nuevo, llegaron también los accidentes de tránsito. El más espectacular ocurrió a la 1:33 sobre la avenida Rivadavia, a la altura de la estación de Ramos Mejía, donde un vehículo que circulaba a alta velocidad perdió el control y embistió a otro que estaba estacionado.

Toda la secuencia quedó registrada en una cámara de seguridad de la zona, que mostró cómo un Fiat 147 color azul chocó de atrás a un Citroen C3 que estaba sobre la mano izquierda del cordón. A raíz del impacto, el auto estacionado se desplazó unos dos metros y hundió su trompa contra el poste de luz.

Los más llamativo es que el Fiat Uno que estaba estacionado delante del C3 zafó de la embestida y el estruendo solo hizo que se activara su alarma.

El 147 quedó completamente destruido y su conductor se salvó de milagro. Para sorpresa de los transeúntes, que se acercaron hasta el lugar para auxiliar al automovilista, el hombre bajó un poco tambaleante y sin dar mayores explicaciones huyó a pie dejando dejando su automóvil abandonado.

El otro siniestro tuvo lugar al amanecer, sobre el km 26 del ramal Tigre de la Panamericana. En esa ocasión, el conductor de una camioneta Nissan Kicks blanca también perdió el control y quedó incrustada en el guardarrail sin chocar a ningún vehículo.

Con un nivel de tránsito equivalente al de antes de la pandemia, desde la Secretaría de Transporte porteña dispusieron controles especiales en zonas estratégicas de la Ciudad.

Según las cifras que maneja el gobierno porteño, el 21% de los siniestros viales con víctimas fatales que se registran en la Ciudad de Buenos Aires están relacionados con el consumo de alcohol. Desde que se incrementó el volumen de tránsito tras la fase más dura de la cuarentena se observan numerosos retenes donde se hacen controles de alcoholemia. Como sucede todos los años, para las épocas de fiestas de Navidad y Año Nuevo, los puestos habituales se reforzaron.

Al igual que la Legislación Nacional (Ley 24.449 y modificatorias), el Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad establece como límite máximo tolerado de alcohol en sangre, 0.5 gr/l para vehículos particulares. Éste además, es el límite tolerado más habitual en el mundo.

Actualmente el límite máximo de alcohol en sangre es:

0.5 gr/l en conductores de vehículos particulares.

0.2 gr/l en conductores de moto vehículos y 0.5 gr/l en acompañantes.

0.0 gr/l en conductores profesionales (taxis, colectivos, camiones, etc) y principiantes.

Cuando el control de alcoholemia arroja un resultado mayor al permitido se labra una contravención, se retiene la licencia del conductor (se otorga una licencia provisoria por 3 días corridos; antes eran 40 días, se cambió con las últimas modificaciones del Código de Tránsito y Transporte) y se remite el vehículo.

Se imprimen dos tickets con el resultado del test realizado y se procede al labrado de actas e informes.

Se remite el vehículo a la Playa de Acarreo correspondiente; previa realización de la Constancia de Remisión del vehículo detallando el estado general del mismo (no se cobra el acarreo).

Se le informa al presunto contraventor que deberá presentarse en la Fiscalía dentro de los 5 días hábiles de labrada el acta Contravencional para regularizar su situación.

Se comunica a operadores la medida adoptada quienes, a su vez, la informan a la Fiscalía.

No se puede ceder el volante en caso de ir con un acompañante.

A partir de la última modificación del Código Contravencional desde el 1 de noviembre de 2018 quienes conducen superando los límites permitidos de alcohol en sangre serán sancionados desde $3.210 (150 UF) a $21.400 (1.000 UF).

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