Tras una semana de calor agobiante, la lluvia trajo alivio en la ciudad de Buenos Aires pero hay alerta por tormentas fuertes y posible caída de granizo

En medio del agobiante calor que se repite desde hace casi una semana, la lluvia se hizo presente la tarde de este viernes y trajo algo de alivio en la ciudad y la provincia de Buenos Aires.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) lo había anticipado. Para hoy, el pronóstico indicaba una jornada inestable con posibilidad de tormentas durante todo el día, aunque la máxima probabilidad de precipitaciones se ubicaba recién para a partir de la tarde. Sin embargo, como las lluvias continuarán siendo intermitentes, las altas temperaturas se podrían mantener hasta esta noche.

En tanto, poco después de las 15, el Servicio Meteorológico emitió un alerta por tormentas fuertes y posible caída de granizo para el norte y para el conurbano de la provincia de Buenos Aires y para el sur de Santa Fe y de Entre Ríos.

“Sobre el área de cobertura se prevén tormentas localmente fuertes, con fuertes ráfagas, abundante caída de agua en cortos períodos, fuerte actividad eléctrica y ocasional caída de granizo. No se descartan mejoramientos temporarios", sostuvo el SMN.

El organismo además advirtió que "sobre Tucumán, centro y este de Salta y este de Jujuy, las condiciones desmejorarán a partir de la tarde de hoy. En el norte de la región se esperan valores acumulados de precipitación entre 60 y 100 mm, pudiendo ser superados en forma puntual, entre lo que resta del día de hoy y el sábado 08. Se determina el cese de alerta para el sudoeste de Córdoba”.

En el amanecer de hoy, el SMN informó en el reporte de las 6 AM, además de mantener vigente la alerta naranja, que la sensación térmica superó los 32 grados, algo que ubicó a la Capital Federal en el podio del ranking de temperaturas por ciudades. Incluso, a las 10, la térmica llegó a 35,8 grados.

Ya por la tarde, a las 15, la temperatura descendió a los 27 grados, mientras la sensación términa continuó por encima de los 29 grados. A esa hora, una masa de nubes negras oscureció la Capital Federal. En las redes sociales los usuarios compartieron imágenes de la intensa caída de agua en los barrios porteños de Caballito, Floresta y Villa Lugano, entre otros. También lo hicieron vecinos del Conurbano y la provincia de Buenos Aires, como en Quilmes, Adrogué y Ramos Mejía.

Las previsiones del SMN marcan que para mañana sábado habrá alivio respecto a las temperaturas en la ciudad de Buenos Aires, ya que se espera una mínima de 22 grados y una máxima de 25. En tanto el domingo se prevé un descenso aún mayor: la mínima pronosticada es de 15 grados, con una máxima de 25. Para la semana que viene –por ahora– se anuncian temperaturas más templadas y sin lluvias.

Una de las consecuencias de la ola de calor fueron los cortes de luz. A las 5 de la mañana de este viernes, la cantidad de cortes de energía llegó a su pico: 37.643 usuarios de Edesur y 13.439 de Edenor estaban sin suministro, contabilizando 51.082 entre ambas prestadoras. Con el correr de las horas, la situación cambió y algunas viviendas comenzaron a recuperar el servicio.

Pasadas las 15 de este viernes, se registraba un total de 30.796 usuarios sin luz, de los cuales 25.914 correspondían a Edesur y 4.882 a Edenor, según datos oficiales del Ente Nacional Regulador de Electricidad (ENRE).

Las zonas más afectadas eran las localidades bonaerense de Virrey del Pino, Marcos Paz, Alejandro Korn, Temperley, Los Pinos, y los barrios porteños de Villa del Parque, San Cristobal, Parque Patricios, Parque Chacabuco y Caballito.

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