Horror en Avellaneda: frenó un colectivo y quiso subirse para agredir con un hierro a su ex pareja

Parecía un viaje más de un colectivo en el Gran Buenos Aires. Eran cerca de las cinco y media de la tarde. Algunos pasajeros regresaban de sus trabajos, otros iban a la facultad, había jubilados y hasta niños. El autobús no se encontraba demasiado lleno. Estaban todos sentados y todavía quedaban butacas libres. Hasta que en unos pocos segundos, todo se convirtió en tensión y pánico. Un hombre bajó de un auto al lado del vehículo y fuera de sí intentó agredir con una barreta a su ex pareja, que viajaba dentro del transporte público. El episodio fue registrado con el celular por una de las pasajeras y hubo que esperar la llegada de la policía para controlar la situación y defender a la agredida.

El hecho ocurrió el martes por la tarde en la calle General Heredia, en Avellaneda. Un interno de la línea 100 cumplía con su recorrido habitual, cuando de repente desde un costado un auto quiso cruzarse por delante del transporte. El conductor del autobús logró esquivar al auto mediante una maniobra pero se quedó detenido al lado del coche, una vez que el conductor salió de su vehículo con vehemencia.

Melina Salmé, una joven estudiante de comercio exterior y marketing, viajaba en el colectivo hacia su facultad cuando quedó incrédula ante lo sucedido.

"Al principio, pensé que cuando el tipo se bajó del auto se trataba de una simple discusión de tránsito con el colectivero. Pero enseguida vimos que sacó una barreta de su auto y empezó a pegarle sin parar a la ventanilla donde estaba una de las pasajeras. Ahí empecé a grabar todo con mi celular", le dijo Salmé a Infobae.

"Nos dimos cuenta de que el tipo quería atacar a una mujer que viajaba con nosotros. No entendíamos nada. El tipo la insultaba y le pedía al colectivero que abriera las puertas. Por suerte no lo hizo", agregó.

La situación pareció terminar allí. El colectivero logró pasar por un costado del auto del agresor y continuó con su recorrido habitual. Hasta que a los 300 metros se vio cómo el mismo individuo cruzó su vehículo en el medio de la calle y fue corriendo hacia el colectivo para continuar con su ataque.

"Vino corriendo y me puse a grabar de nuevo. Estaba más sacado y todos adentro estábamos más asustados. La mujer, que tenía entre 40 y 50 años, no lloraba ni decía nada, estaba como en un estado de shock", relató Salmé a Infobae.

Según la joven estudiante, algunos pasajeros le pedían al chofer que abriera las puertas para ir a pelearse con el sujeto, pero el conductor se rehusó a hacerlo. Mientras, otra de las pasajeras llamaba a la policía para que acudiera de inmediato.

"Cuando esperábamos que llegara la policía, me acerqué a la mujer para ofrecerle los videos, por si iba a hacer la denuncia. Ella me respondió que ya tenía hechas varias denuncias, que el hombre era su ex pareja y que existía una perimetral en su contra. Ella me dijo que estaba yendo a buscar a su hijo al colegio y que era lo único que le importaba en ese momento", afirmó Salmé.

A los pocos minutos, se acercó al lugar un móvil de la Policía Bonaerense que dialogó con la mujer y le ofrecieron ir juntos a una comisaría cercana para realizar una nueva denuncia. "El hombre creo que incluso fue a la comisaría con su propio auto".

Sin embargo, según pudo averiguar Infobae, todavía no se radicó una nueva denuncia en las comisarías de la zona por lo ocurrido en el colectivo.

"Pasamos todos un momento de terror. No se sabía qué iba a pasar. Y pudimos vivir en carne propia el infierno por el que pasó esa mujer durante tanto tiempo. Es una sensación de pánico absoluta. Ni pensar lo que podría haber pasado entre ellos si no estábamos el resto de las personas del colectivo ahí", reflexionó Salmé.

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