El gitano Luis Miguel que protagonizó la pelea en Palermo seguirá detenido

Así lo decidió el juez Luis Zelaya, que tiene a su cargo la causa que se le inició por lesiones gravísimas y portación de arma. Le negó la fianza y asegura que hay riesgo de fuga

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infobae

El lunes último por la madrugada, Jorge Luis Miguel, miembro de la comunidad gitana, actuó como un verdadero picante. Tras salir alcoholizado de una fiesta de 15 a bordo de un BMW M4 valuado en casi 170 mil dólares, chocó en contramano en la zona de Palermo con una camioneta Renault Sandero.

El conductor de la camioneta terminó en el Hospital Fernández. Acompañado de miembros de su familia, esgrimió un arma de fuego y amenazó a efectivos de la Policía de la Ciudad y periodistas. Terminó en el suelo esposado y enviado a la Comisaría N° 23 con dos causas en su contra, una por amenazas que tramita en el fuero correccional y otra por lesiones, a cargo del juez Luis Zelaya y el fiscal Ignacio Mahiques.

En el BMW, la Policía encontró dos pistolas, una Glock .9 mm y una Bersa calibre .40. Para la primera, Miguel tenía permiso de portación. Para la segunda, no demostró ningún papel. Ya había tenido problemas con la ley en el pasado. Tuvo causas por robo a mano armada ya de menor de edad, fue arrestado este verano en Pinamar por robar casas bajo la modalidad de escruche y en su casa de la calle Boyacá se alojó "Monchi Cantero", el número 3 de la banda narco Los Monos, prófugo durante tres años y detenido en junio pasado.

Este miércoles por la mañana, el juez Zelaya decidió que Luis Miguel quede encarcelado bajo prisión preventiva y sin ninguna posibilidad de caución, según la resolución a la que accedió Infobae. Lo hizo en concordancia con el dictamen enviado por el fiscal Mahiques y a pesar del pedido de excarcelación presentado por el doctor Rodrigo González, abogado de Miguel.

Zelaya aseguró que hay riesgo de fuga, que "las calificaciones legales auguran una condena de eventual cumplimiento efectivo" y que "no parece descabellado que la libertad del acusado podría comprometer el regular avance de la investigación". Zelaya valoró la forma "temeraria" de conducir de Miguel, así como las pistolas en su poder, una con 13 balas en su cargador.