El empresario Lázaro Báez llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación con su pedido para que se reduzca la fianza de 386.578.500 de pesos para poder salir en libertad. La defensa de Báez, a cargo de los abogados Juan Martín Villanueva y Elizabeth Gasaro, presentaron en el máximo tribunal lo que se conoce como un planteo de queja para que la Corte revise el monto de la fianza y la modifique.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que la presentación ingresó a la Corte, la última instancia en la que la defensa puede reclamar. Es contra los fallos del Tribunal Oral Federal 4 y la Cámara Federal de Casación que fijaron la fianza. La defensa sostiene que el monto no puede ser afrontado porque Báez tiene sus bienes embargados por la justicia, por lo que tampoco puede acceder a un seguro de caución. Los abogados explican que la libertad debe primar sobre el monto de una fianza. Los 386 millones de pesos se fijaron por el monto del presunto lavado de dinero que se le imputa al empresario, que es de 5,5 millones de dólares. Se trata del expediente conocido como “M&P”
La caución de Báez estuvo bajo discusión. Primero el Tribunal Oral Federal 4, que lo juzga por lavado de dinero, la fijó en 635 millones de pesos pero luego Casación la redujo a 386 millones. Ese monto quedó firme por otras resoluciones del Tribunal Oral y de Casación. Ahora llegó a la Corte Suprema, lo que deberá ser resuelto por los jueces del máximo tribunal, Carlos Rosenkrantz, Elena Highton de Nolasco, Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda.
Báez está en prisión domiciliaria desde el 9 de septiembre. Se encuentra en un lugar secreto para evitar las manifestaciones en su contra, como la que tuvo en el country Ayres del Pilar -donde originalmente iba a cumplir la detención hogareña- donde los vecinos del lugar impidieron el ingreso del empresario y hasta atacaron el vehículo del Servicio Penitenciario Federal que lo traslado. Un vecino del barrio privado fue detenido por ese ataque.
El empresario estuvo más de cuatro años en la cárcel de Ezeiza. Fue detenido el 5 de abril de 2016 y con los plazos cumplidos para estar detenido bajo prisión preventiva, es decir sin condena. El plazo máximo que establece el Códigp Procesal Penal es de tres años.
La defensa de Báez reclamó su prisión domiciliaria porque integra “al menos cinco grupos de riesgo respecto de la pandemia de COVID-19, circunstancia que, en las condiciones de su detención, se traduce en un mayor peligro para su vida e integridad física”. El arresto domiciliario fue otorgado por los jueces de Casación Mariano Borinsky y Javier Carbajo. Mientras el empresario insiste su libertad definitiva para lo que hoy llegó a la Corte Suprema.
Báez, junto a sus cuatro hijos -uno de ellos, Martín, preso- el arrepentido Leonardo Fariña, el financista Federico Elaskar, entre otros acusados, afronta el juicio oral por la llamada ruta del dinero K en la que se juzga el presunto lavado de dinero proveniente de la obra pública que el empresario recibió entre 2003 y 2015 durante los gobiernos de Néstor y Cristina. En el juicio, el fiscal Abel Córdoba pidió que sea condenado a 12 años de cárcel y que pague una multa de $2.121 millones. El empresario también acumula tres pedidos de penas de entre 8 y 9 años de cárcel de las tres querellas.
También está siendo juzgado por las presuntas irregularidades en la obra pública. Ese juicio lo afronta junto a la vicepresidenta Cristina Kirchner. Y espera el inicio de otros procesos, como “Hotesur-Los Sauces”.
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