Habló de uno de los extranjeros detenidos en los incidentes del Congreso: "Ni sabía que había una marcha, era mi primera vez en Buenos Aires"

El turco Anil Baran está casado con una cordobesa y vive en esa provincia. Dijo que no formó parte de los disturbios

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Anil Baran, de turista por la ciudad cordobesa en Alta Gracia
Anil Baran, de turista por la ciudad cordobesa en Alta Gracia

Anil Baran, nacido en Turquía, es uno de los cuatro extranjeros detenidos el miércoles pasado por los destrozos frente al Congreso, mientras la Cámara de Diputados debatía la media sanción del Presupuesto 2019. El joven, de 27 años, quedó en el centro de la atención luego de que el Gobierno anunciara que avanzará con el trámite de deportación al país de origen a los involucrados en los incidentes.

"Nunca llegué al centro, ni siquiera estuve cerca, ni siquiera estuve cerca, en Humberto Primo me detuvo un policía motorizado. Me dispararon dos veces y después me retuvieron en el suelo", sostuvo Baran, quien recuperó la libertad el jueves por la tarde junto con los otros tres inmigrantes detenidos. "No sabía que había una marcha, estaba en Constitución" en ese momento, añadió.

El joven, quien está casado con una cordobesa y vive en esa provincia, dijo que estaba de visita en Buenos Aires el día que fue detenido. "Yo estoy casado. No tengo nada, todo limpio, en mi país y acá. Tengo todos mis papeles en migración", indicó hoy en diálogo con Ernesto Tenembaum, por radio Con Vos.

Baran llegó a la Capital Federal el martes pasado y se encontró el miércoles con un amigo en la ciudad de La Plata. Venían de allí cuando se despidieron en la zona de Constitución y cada uno tomó su camino. Eran las 3 de la tarde.

"Yo quise conocer el centro, no conozco Buenos Aires. Estaba a dos cuadras de la 9 de Julio, con banderas, vi que la gente estaba yendo. Estaba bastante tranquilo", dijo Barán. "Cuando llego a Humberto Primo -continuó-, la Policía viene con 20 motos, pasaron a tirar gas y dispararon a la gente. La marcha estaba atrás, a más o menos unos 200 metros".

Baran tiene 27 años y se casó con una cordobesa. “Quiero mucho a la Argentina”, afirmó
Baran tiene 27 años y se casó con una cordobesa. “Quiero mucho a la Argentina”, afirmó

"Como toda la gente caminé y doblé en Humberto Primo, (ahí) dos motos de la Policía me agarraron y me dispararon en la pierna", siguió el turco en su relato. "Dije un montón de veces 'soy extranjero', no me escucharon. Me llevaron hasta la 9 de Julio con otros muchachos", advirtió.

El joven dijo que todos los reclusos estuvieron en el móvil policial con un precinto de seguridad y que se quedaron allí "unas cinco horas sin salir". "No me dijeron nada, ni a qué tengo derecho, no me pude comunicar con mi amigo, (él) no sabía nada", añadió.

Baran contó que vino a la Ciudad de Buenos Aires esta semana para hacer "unos trámites en la Embajada" turca. "Estuve trabajando en Córdoba en una empresa de transporte. Con la crisis perdí mi trabajo, y como no estaba trabajando, quería terminar estos trámites en Buenos Aires", aseguró.

En sus redes sociales, Baran se declara como un "cordobés por adopción" . Durante el reportaje, dijo que llegó al país porque conoció a su amigo argentino -a quien visitó esta semana- cuando él estaba viajando por Turquía. "Me habló mucho (sobre la Argentina), la cultura, la historia. Con el tiempo me interesó (venir) y conocer a la gente, me convenció", expresó.

El ciudadano turco, junto al paraguayo Luis Fretes (36) y los venezolanos Felipe Uleo (31) y Víctor Ulea (23), integraron el conjunto de los 26 detenidos en el marco de los disturbios frente al Congreso el pasado miércoles, donde se aprobó la media sanción del Presupuesto 2019.

Tras resultar aprehendidos, los extranjeros quedaron en la mira del Gobierno nacional, que aceleró los trámites de deportación por quedar involucrados en los destrozos y los enfrentamientos. Así lo ratificó esta mañana el director nacional de Migraciones, Horacio García.

Sin embargo, Baran no quiere irse. "Yo quiero mucho a la Argentina, tiene otro significado para mí, quiero mucho a Córdoba. Ahora está un poco díficil para vivir, la vida es un poco más caro (sic) que cuando llegué en 2016″,  lamentó. 

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