La Procuración informó que se tomaron medidas para extremar la protección del fiscal federal Federico Delgado. Fue luego de que el propio fiscal declarara que temía "terminar con un tiro o un kilo de droga en el auto" y de que Elisa Carrió reclamara que se reforzara su seguridad y se garantizara su independencia.
"Ante las inquietudes expuestas por distinto medios acerca de hechos que se señalan como obstructivos del correcto desempeño de los fiscales y, en concreto, respecto de ciertas circunstancias referidas por el señor Fiscal Federal doctor Federico Delgado, cabe indicar que se han efectuado las gestiones del caso ante las autoridades competentes para que, aún dentro de las limitaciones derivadas de la decisión del magistrado de no contar con profesionales de las fuerzas de seguridad para salvaguardar su integridad física, se extremaran las medidas para su protección", dice el comunicado de la Procuración.
El comunicado agrega que "en cuanto a la solicitud de respaldo institucional con motivo de haber sido citado a prestar declaración indagatoria, si bien esta Procuración no puede intervenir en procesos judiciales fuera de las oportunidades en que legalmente le corresponde es preciso destacar que, dentro del marco normativo vigente, se continuará haciendo todo lo necesario para asegurar la eficaz intervención de todos los agentes de este Ministerio Público en defensa de la legalidad y los intereses generales de la sociedad, así como el debido respecto de las inmunidades funcionales que amparan la actuación de los mismos".
Delgado fue citado a declaración indagatoria por el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi en el marco de un expediente en que se lo acusa de haber difundido información sensible del caso por las muertes de cinco jóvenes por consumo de drogas ocurridas en la fiesta electrónica Time Warp, que se realizó en Costa Salguero en 2016.
"No soy tonto: en los últimos dos años he tenido intervención en causas muy sensibles, en las que llegamos a lugares en los que no pensábamos que íbamos a llegar. Evidentemente, por la fragilidad institucional de la Argentina esas cosas terminan mal", advirtió Delgado.
Y enseguida advirtió su temor a "terminar con un tiro o un kilo de droga en el auto".
A raíz de eso, Carrió salió en su defensa y difundió una carta que le envió al procurador Eduardo Casal para que se haga cargo de "garantizar el correcto funcionamiento del Ministerio Público y la libertad necesaria para llevar adelante las investigaciones a su cargo".
Según pudo saber Infobae, Casal le ofreció dos veces en las últimas 24 horas una custodia personal, aunque el fiscal hasta ahora se negó a aceptar.
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