Procesaron por falso testimonio a un amigo del ex camarista Eduardo Freiler

Eduardo "Chiche" Freiler fue destituido por mal desempeño de sus funciones por el Consejo de la Magistratura y ya no ocupa el lugar que tuvo en la Sala I de la Cámara Federal porteña. El macrismo hizo todo lo posible para apartarlo de su cargo y lo consiguió.

Pero aún quedan algunas derivaciones de lo que fue el proceso de juicio político en el que Freiler -porque no pudo justificar el incremento de su patrimonio- fue destituido.

Amílcar Ricci, uno de los testigos del proceso, fue procesado por el juez federal Luis Rodríguez por el delito de falso testimonio.

El procesamiento se debe a que cuando Ricci -amigo del ex camarista- declaró ante el Consejo, le preguntaron si tenía cédulas azules -que habilitan a conducir vehículos que no son propios- de dos autos de Freiler. Dijo que sí respecto de una camioneta Toyota pero negó tener una cédula azul que lo autorizaba a conducir un Mercedes Benz C250 y un viejo Jeep.

En el Consejo de la Magistratura -el órgano que puede remover jueces- le habían preguntado también si alguna vez le había comprado un auto a Freiler. Explicó que no. Pero se demostró que un camión que en 2011 era del ex camarista está a su nombre.

El Consejo de la Magistratura hizo la denuncia para que se investigue el falso testimonio y cuando fue indagado por Rodríguez, Ricci presentó un escrito en el que pidió su sobreseimiento y además dijo que el auto que estaba a su nombre había sido una cesión de Freiler por unos trabajos de jardinería y agronomía.

Incluso, dijo Ricci, que como era viejo nunca lo pudo sacar del campo del ex camarista donde hizo los trabajos. Cuando le preguntaron por la transferencia, ya no la recordaba.

Ricci explicó que nunca se enteró de que había cédulas azules a su nombre y que el trámite para hacerlas no requiere de la firma del beneficiario.

Para procesar a Ricci, el juez Rodríguez también consideró que había cometido el delito de falso testimonio cuando dio una confusa explicación acerca de quién había llenado 12 cheques que le permitieron a Freiler comprar un auto Mercedes Benz.

Los cheques eran de la cuenta de Raúl Mingini, dueño de una fábrica de pastas que había sido beneficiado por Freiler en una causa por narcolavado.

La controversia surgida sobre si Ricci había llenado o no aquellos cheques sumó un motivo al procesamiento.

En la resolución dictada por Rodríguez, a la que accedió Infobae a través de fuentes judiciales, se estableció que "no se advierte elemento alguno que justifique el accionar del imputado o lo exima de responsabilidad; juzgándose en consecuencia que su conducta disvaliosa fue ejecutada con voluntad y discernimiento".

Ricci fue procesado sin prisión preventiva y le fijaron un embargo por 30.000 pesos.

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