María Emilia Soria: "Los chacareros no quieren subsidios"

La diputada rionegrina que ayer puso en aprietos al jefe de Gabinete Marcos Peña habló con Infobae sobre la situación de los productores frutícolas

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Ayer, durante el informe mensual del jefe de Gabinete en la Cámara de Diputados, la legisladora rionegrina María Emilia Soria (FpV-PJ) interpeló a Marcos Peña en duros términos por la indolencia del Gobierno ante la situación de los productores de peras y manzanas de su provincia, quienes repartieron frutas como modo de protesta en la Plaza de Mayo. En diálogo con Infobae TV, Soria sostuvo que no quiso faltarle el respeto al jefe de Gabinete, "pero tienen que entender que con la manzana chilena, con el pescado de Chile, el pollo de Brasil, con la naranja de España, claramente hay que buscarle otra salida porque las economías regionales van a desaparecer".

"Si van al Alto Valle en este momento, va a ver que todavía hay manzanas pudriéndose en los árboles, porque los chacareros saben que van a ir a pérdida, ni siquiera las cosechan", añadió la diputada, quien explicó a Infobae TV la situación del sector.

-¿Qué fue lo que pasó ayer con Peña?

-Lo cierto es que lamentablemente los productores de mi provincia fueron, no diría maltratados, pero sí ninguneados durante todo el día de ayer, yendo de un ministerio a otro, dejando notitas, pidiendo que nos reciban, desde el martes que estaban manifestándose pacíficamente en Plaza de Mayo entregando fruta, entregando el trabajo de todo un año. Porque esto es un árbol que tarda 7 años en dar fruto y que se cosecha una sola vez al año. Y que lleva un cuidado intensivo y una mano de obra intensiva. Y entonces, ver a estos chacareros que tiene 60 o 70 años, y muchos no tienen otra generación que les continúe con la chacra, y ya están cansados la verdad, porque tanto maltrato durante tantos años ya están cansados. Ver cómo los maltrataron en cada uno de los ministerios y no les dieron una respuesta, la verdad es que lo vi como una agresión hacia mis vecino. Muchos de ellos son vecinos de mi ciudad, y quisimos llamar la atención del jefe de Gabinete para que realmente nos reciba. Aparentemente Macri no los va a recibir, a pesar de que ha recibido a muchos personajes importantes y destacados de la sociedad. Pero se ve que los productores que generan muchísima mano de obra no son importantes, y a ellos no los quiso recibir.

-La situación de los productores no es nueva. Las protestas llevan ya varios años. ¿Tenían algún tipo de expectativa respecto del Gobierno del PRO? Porque hicieron una campaña hablando de las economías regionales muy intensa…

-Hasta fueron a la chacra de uno de los vecinos, ahí en Cervantes, el productor Marín. Todos pensábamos sinceramente que iba a haber otro diálogo, y que iba a haber otro interés con las economías regionales. Y esto hay que reconocerlo. Es cierto, y yo lo dije ayer: esta crisis no es nueva, esta crisis viene de antaño. Ayer mirábamos en el cronograma de la Cámara de Diputados proyectos del año 72 por problemas frutícolas. Esto no es responsabilidad del gobierno actual, por supuesto. Es responsabilidad de gobiernos provinciales y nacionales anteriores a éste.

-Incluido el del peronismo.

-Por supuesto que incluido el peronismo. Yo soy diputada nacional desde hace dos años y medio. Cuando ingresé a la Cámara de Diputados éramos oficialismo, e impulsé un proyecto, que es el Fondo Nacional Frutícola, que costó muchísimo convencer a otros diputados de otras regiones sancionarlo. Le pudimos dar media sanción haciendo eco y escuchando a los productores de mi región. Muchos dicen "sale ahora, antes no decía nada". Nosotros estamos con esto hace años. Lo cierto, y esto hay que reconocerlo, los Gobiernos anteriores, si bien no se ha buscado, no pudieron encontrar una estructura legal, comercial, para trasparentar una solución definitiva a esto. Siempre se dieron puchitos, "bayaspirina", como decimos nosotros: un subsidio para la poda, un subsidio para el raleo. Los chacareros no quieren subsidios, eso era un paliativo momentáneo, con eso más o menos sostenían, podían vender un poquito mejor, por ahí a veces no les alcanzaban.

-Más allá de un subsidio o paliativo, ¿cuál es la solución del problema?

-Viéndolo desde adentro, y teniendo en cuenta el trabajo que venimos haciendo en la Cámara de Diputados, son tres herramientas, que las tres estaban a disposición del Gobierno nacional, que me encantaría que el Gobierno nacional hable con sus diputados y que nos acompañe y que esto sea en lo inmediato, que lo debatamos, modificamos lo que consideren, y lo sancionemos rápido, porque esto no puede esperar. Uno de ellos es el Fondo Nacional Frutícola: los impuestos que paga la fruticultura que vuelvan a la fruticultura. No estamos pidiendo plata del Gobierno, no queremos que el Gobierno siga con estos subsidios. Queremos una estructura que la plata sea ordenada. Es verdad que de un día para otro no puede el chacarero no puede hacerse cargo de un programa de sanidad. Las reglas la pone siempre el comercio exterior, pero sí que todo aquello que paga el chacarero vuelva a la industria frutícola y el chacarero pueda mejorar la tecnología, mejorar el tractor, comprar una cosechadora. Hoy me decía: "bueno, pero el chacarero no invierte en la chacra". Pero no invierte porque es carísimo. Un tractor moderno es carísimo: el chacarero tiene que empeñar la chacra si quiere cambiarlo. Me decían hoy que el gobierno tiene 150 millones en créditos blandos para el chacarero. Eso es no conocer la realidad. Porque el chacarero hoy no puede tomar créditos, no se lo permiten los bancos, no se lo autorizan, porque tienen planes de pago con la AFIP. Pregúntenle a cualquier chacarero si puedieron tomar uno de estos famosos créditos bandos que invita el gobierno nacional actual. Eso no lo pueden hacer, porque tienen créditos y planes de cuotas que los obligan a cancelarlos de una y es imposible.

-¿Cuáles son las otras herramientas?

-El Instituto de la Pera y la Manzana, lo que permite es fijar un precio de referencia. Los chacareros fueron muy claros: el kilo de manzana la vende a 3 pesos, 3 pesos y pico. Los costos son 4,5: un peso cincuenta de impuestos. Es decir que cuando el chacarero lo cuidó todo el año la manzana -ahora estamos en época de helada-, cuidó la flor, la podó, la realeó, y cuando va a entregar su fruta, pierde un $1,5. Y encima que le pagan menos que lo que gastó, se lo pagan a lo largo de todo un año. Es decir que a él le pagan a lo largo de todo un año, no es que se lo pagan con intereses. Va a pérdida. Entonces, el Instituto de la Pera y la Manzana, para que todos los sectores -chacareros, industrial, comercializador, trabajadores rurales, el empaque, las provincias, laudando por encima el Ministerio de Agricultura- definan un precio. Igual que la yerba mate. Ese es otro, y el tercero es un sistema de trazabilidad de la fruta. Nosotros tenemos un sistema de trazabilidad en sanidad, es decir que la fruta que por ejemplo se exporta a Brasil, tenemos un sistema, un código de barras, que podemos saber y rastrear esa fruta que llegó. ¿Para qué sirve? Si por ejemplo llega un lote que está en mal estado porque tiene alguna enfermedad, rápidamente se puede sacar del mercado. Este sistema ya existe. Lo que nosotros pretendemos es que este sistema se expanda a la industria y al mercado interno. ¿Para qué? Para que el chacarero, cuando va a dejar su manzana, no le digan "fue todo a la industria" o "fue todo al mercado central, nos pagaron chaucha y palito", y terminó esa góndola en Francia, beneficiando a los exportadores, que son siempre los beneficiados en esto, y perjudicando al chacarero.