Villa María del Triunfo ha sido escenario de un violento episodio el último lunes, cuando un ataque perpetrado por sicarios dejó como resultado dos personas muertas y otras dos heridas.
El incidente tuvo lugar en la urbanización José Carlos Mariátegui, y las autoridades locales sospechan que esta ataque está relacionado con el cobro de cupos en el sector de construcción civil. Las víctimas mortales han sido identificadas como David Andrés Cruz y Ángel Marcelino Pillaca Pablo, de acuerdo con la información de Panamericana TV.
Según lo registrado por las cámaras de seguridad, el ataque comenzó cuando uno de los sicarios persiguió a un hombre que estaba reparando su vehículo.
Sin oportunidad de defenderse, la víctima fue abatida con varios disparos. Paralelamente, otro sicario se dirigió hacia una mototaxi estacionada en la misma calle y disparó sin piedad a los ocupantes del vehículo.
Un pasajero de ese carro, que vestía una polera blanca, intentó refugiarse en un restaurante cercano, pero fue alcanzado por disparos en la cabeza y la espalda, por lo que falleció al instante.
Otra persona resultó gravemente herida y quedó tendida en la calle, mientras los delincuentes huían, según el citado medio de comunicación.
Las autoridades locales y el Ministerio Público están investigando el ataque, que se cree está vinculado al cobro de cupos en el sector de construcción civil, un patrón recurrente de violencia en la zona. Las imágenes de las cámaras de seguridad serán clave para identificar a los agresores y esclarecer la secuencia de eventos.
Una de las víctimas heridas fue trasladada al Hospital María Auxiliadora y tuvo que ser sometida a cirugía por un traumatismo abdominal abierto. Su condición es estable, mientras que la otra persona herida sufrió daño pulmonar y fracturas en las costillas y estaba siendo preparada para una intervención quirúrgica.
La comunidad local de José Carlos Mariátegui ha expresado una creciente preocupación por la seguridad. Los residentes denuncian un incremento de los asaltos y balaceras, y exigen una respuesta más efectiva de las autoridades para afrontar la violencia.
“Vivimos en una inseguridad muy grande. Se escucharon alrededor de 10 a 12 balas,” comentó un vecino, quien no quiso revelar su identidad, a Panamericana Televisión.
¿Qué es el ajuste de cuentas?
El ajuste de cuentas es una represalia violenta que ocurre como consecuencia de conflictos previos, generalmente relacionados con actividades ilegales, deudas no saldadas o traiciones dentro del crimen organizado. Este término es utilizado para describir ataques dirigidos, como asesinatos o agresiones, que buscan “saldar” una ofensa o incumplimiento percibido.
Suelen involucrar a bandas criminales o personas ligadas a actividades ilícitas, como el narcotráfico o la extorsión, y tienen como objetivo enviar un mensaje de poder o venganza. Estas acciones, por lo general, ocurren en un contexto de violencia deliberada y planificada.
¿Cómo denunciar una extorsión?
Para hacer frente al aumento de casos de extorsión, la Policía Nacional del Perú (PNP) ha establecido una serie de canales de denuncia accesibles para los ciudadanos.
El número de emergencia 1818 está disponible para reportar casos de extorsión. Esta línea directa permite a los ciudadanos comunicar sus denuncias sin necesidad de desplazarse, facilitando un reporte rápido y eficiente desde cualquier ubicación.
Además del teléfono de emergencia, la PNP ha habilitado un número de celular para contacto directo, el 942841978, que ofrece otra vía para denunciar estos delitos.
Las comisarías locales también juegan un papel fundamental en la estrategia de prevención y control de la extorsión. Están situadas en diferentes distritos, permitiendo que los ciudadanos presenten sus denuncias de manera presencial. Este método tradicional sigue siendo esencial para quienes desean realizar su reporte cara a cara con un oficial.
Por otro lado, el papel de los Departamentos de Investigación Criminal (Depincri) es crucial. Estas unidades especializadas se enfocan en investigar delitos graves, incluyendo la extorsión.