Congresistas reconocen alto rechazo del país por no aprobar el adelanto de las elecciones generales

Debido al bloqueo para adelantar las elecciones generales para este 2023, el pueblo peruano ha mostrado su rotundo rechazo hacia el Congreso de la República. Allí, la indecisión entre las bancadas de derecha e izquierda ha provocado que este poder del Estado tenga ya 90% de desaprobación según la más reciente encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP).

Además, el 33% de peruanos considera que los legisladores se quedarán hasta el 2026 para cumplir el quinquenio por el que fueron elegidos hace dos años en la urnas. De esta manera, se aferrarían a sus cargos tal como propone la bancada de Renovación Popular con el almirante Jorge Montoya a la cabeza.

Esta percepción negativa de la opinión pública parece que algunos legisladores saben reconocerlo.

Ruth Luque (Cambio Democrático - Juntos por el Perú) indicó que lo ocurrido en las últimas semanas con la falta de decisión política de los partidos ha sido la consolidación de una crisis que viene desde años anteriores.

“Considero que la encuesta es un reflejo del rechazo mayoritario de la población. Para mí, el Congreso es una institución que está perdiendo cada vez más representación, producto de las crisis de años pero hoy se ha profundizado por evidencias claras de no contribuir en una salida a la actual crisis política como el adelanto de elecciones, no fiscalizar ni hacer control político a un gobierno claramente violador de derechos y por vergonzosas declaraciones de varios de sus integrantes con relación al tema de la alimentación por ejemplo”, comentó al diario La República que la abordó en Cusco.

Por su parte, Esdras Medina (Somos Perú) indicó que no entiende por qué hay tanto rechazo contra los parlamentarios cuando varios trabajan por el pueblo.

“Es inexplicable que estén en contra de un Congreso que ha trabajado horas y que hemos elaborado leyes a favor de la ciudadanía”, dijo. Además, no asumió ninguna responsabilidad como miembro de la representación nacional por no haber logrado que los comicios generales se hagan lo antes posible.

Por su parte, Guido Bellido (Perú Bicentenario) y Luis Aragón (Acción Popular) mencionaron que por culpa de un grupo de sus colegas, todos son calificados de manera negativa por el pueblo.

La ministra de Vivienda, Hania Pérez de Cuellar, pidió al Congreso de la República que reconsidere su postura de no discutir otra vez el adelanto de las elecciones generales como una salida a la grave crisis política que padece el país desde que Dina Boluarte asumió el poder en reemplazo de Pedro Castillo tras su fallido autogolpe de Estado en diciembre del año pasado.

“Le diría que reflexionen y tomen la decisión que mejor le haga al Perú. Creo que es importante que el Congreso tome conciencia de la opinión pública y en su momento deberán dar cuenta sobre gestión, como a nosotros nos tocará darla ante la ciudadanía de lo que hemos podido hacer en dos meses”, indicó al programa dominical Cuarto Poder.

La titular de la cartera de Vivienda recordó que el Ejecutivo envió dos proyectos de ley para que los comicios se hagan lo antes posible en respuesta a las protestas sociales en Lima y regiones del sur que demandaban, principalmente, este asunto. Recalcó que todo está en manos del Legislativo y que seguirán trabajando mientras aún no se resuelva nada.

El dominical Panorama reveló en su última edición que el Congreso de la República accedió a la compra de 1 600 metros de alfombra para diversas áreas del Parlamento, cuyo monto es de 315 mil soles.

Además, la nota periodística evidenció los documentos aprobados por el Parlamento sobre la compra de otros productos a costo muy por encima de su precio real. Por ejemplo, al cotizar en el mercado las mismas alfombras con las mismas especificaciones y el mismo metrado, se valorarían en S/ 149 400, quiere decir que hay una sobrevaloración de 165 mil 600 soles por la adquisición de este producto.

Sin embargo, no todo queda aquí, pues al buscar a la empresa ganadora de esta compra, los investigadores se dieron con la sorpresa que la dirección que se evidencia en la proforma, cuadra 41 de la avenida Próceres de la Independencia, en San Juan de Lurigancho, es nada más que una pollería.