Amenaza viral

Casi siempre en el cine de tipo apocalíptico algún virus mortal es el peor enemigo de la humanidad. Ahora, una serie documental que analiza las epidemias más letales y muestra por qué la viruela podría convertirse en una amenaza bioterrorista, reaviva la alarma. ¿Cuánto hay de posibilidad de que algo así realmente suceda?

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Amenaza viral: una serie documental que analiza las epidemias más letales y muestra por qué la viruela podría convertirse en una amenaza bioterrorista, reaviva la alarma
Amenaza viral: una serie documental que analiza las epidemias más letales y muestra por qué la viruela podría convertirse en una amenaza bioterrorista, reaviva la alarma

El Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos define a los agentes biológicos "que tienen el potencial para ser una severa amenaza a la salud y la seguridad pública" en categorías A, B y C.

La viruela está en la A (agente de alta prioridad por ser fácilmente transmitido y diseminado) junto a la tuleramia o fiebre de los conejos, ántrax, toxina botulínica, peste pulmonar y fiebre hemorrágica viral. El riesgo de un posible brote de viruela está en que algunos virus están conservados en laboratorios de Rusia y Estados Unidos. Aun cuando la gente nacida antes de 1970 (año en que se erradicó la enfermedad) haya sido inmunizada, la efectividad de la vacuna está limitada a un plazo de 3 a 5 años. Como arma biológica, la viruela es peligrosa por su naturaleza altamente contagiosa. Y el hecho de que no se vacune más contra esa enfermedad porque ya ha sido erradicada deja a la población desprotegida ante un posible rebrote.

Las vimos más de una vez en la pantalla del cine: las epidemias como grandes amenazas mundiales. Imágenes devastadoras, muerte, desolación y miedo. ¿Cómo no recordar las escenas de Epidemia (1995, con Dustin Hoffman y Morgan Freeman), o la película británica El jardinero fiel (2005) en la que quedan al descubierto maniobras y complicidades vinculadas al uso de enfermedades y medicamentos? De sólo pensarlo se nos pone la piel de gallina.

Discovery Channel estrena un documental bajo el nombre de Virus donde se plantea la posibilidad de que enfermedades como la viruela (que ya está erradicada) regrese de la mano del bioterrorismo. Esta enfermedad mató a 500.000.000 personas en todo el mundo hasta finales de 1970, cuando fue erradicada. Pero ¿podría volver? ¿Regresaría rediseñada? ¿Servirían las vacunas almacenadas?
"La viruela es una enfermedad del pasado que se caracterizaba por provocar verdaderos brotes. Empezaba con lesiones de piel que se distribuían en todo el cuerpo formando lesiones severas. El índice de mortalidad era del treinta por ciento", asegura el infectólogo Eduardo López (M. N. 27.586), director del Programa de Infectología pediátrica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, y agrega: "La viruela no va a volver porque ya fue erradicada, pero existe la posibilidad de que laboratorios que hayan guardado la cepa sean atacados por organizaciones terroristas con la intención de diseminarla en el aire y matar".

Categórico, aunque optimista en que ésta es sólo una de las hipótesis. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades –organismos estatales de Estados Unidos– la viruela es al día de hoy una de las principales amenazas bioterroristas.
Gabrielle Tenenbaum es la productora ejecutiva de la serie y le explicó a Para Ti: "Creo que si la viruela vuelve será un evento sorprendente para todos y si eso sucede será como producto de una guerra bacteriológica en muchos sentidos. Si una persona no está expuesta, entonces no habrá viruela. Por eso creemos que es importante generar alertas y concientizar más a las personas sobre el tema, como intentamos hacerlo con Virus".

SEÑALES DE ALERTA. El Dr. Eduardo López, también jefe del Departamento de Medicina del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, afirma que la viruela afectaba a todas las personas por igual: "Comenzaba con un período de incubación de unos 12 días, con fiebre alta, malestar, dolor de cabeza y de espalda. Luego aparecían exantemas –erupciones en la piel– en las mucosas, como en la boca y la faringe, y se extendían a la cara, los miembros y las extremidades. Evolucionaba en una semana con la aparición de pústulas (lesiones epidérmicas o subdérmicas con pus) que penetraban hasta partes profundas de la piel. Éstas dejaban secuelas con severas cicatrices y podía haber infecciones bacterianas. Las complicaciones eran realmente graves y consistían en neumonías, infecciones generalizadas y lesiones articulares, en córnea –dejaban ceguera– y encefalitis. No había tratamiento. Lo único efectivo era la vacuna preventiva, por eso se la pudo erradicar".

En esta línea, Tenenbaum agrega que "no sólo se pudo contener el virus, sino que además la enfermedad tenía (¿o tendría?) la bendición de que no había portador animal involucrado, a diferencia de lo que ocurre con otros virus que son transportados por los animales y, por lo tanto, siempre existe la posibilidad de que vuelvan a reingresar a la sociedad porque son los animales los que los traen de vuelta. En el caso de la viruela no hay portador animal, de manera que no existe el riesgo de que pueda volver. Esa fue precisamente la gran oportunidad que vieron esos científicos y trabajadores de la salud: la posibilidad de terminar con el virus".

Por otra parte, López destaca que había un tipo de viruela conocida como "viruela negra" que, aunque más infrecuente, era más mortal, con una tasa del 95% de muertes, especialmente en mujeres embarazadas.

Según el documental, la viruela podría ser un agente de bioterrorismo, una bomba biológica de tiempo y un arma de destrucción masiva. Es decir que, aunque fue erradicada, "puede regresar diseñada artificialmente".

Suena fuerte, sí, pero la comunidad médica, científica y altos funcionarios de distintos países a nivel mundial lo evalúan y toman medidas de prevención.

En este sentido, la productora ejecutiva explica que "la única manera en que la viruela puede regresar es si es provocada por los stocks restantes que, se supone, están bien asegurados y todos sabemos que hay una gran preocupación con respecto a este punto porque, con los avances y la tecnología, hoy es posible crear viruela en un laboratorio. La preocupación radica en que por la forma en que se hoy se puede manipular el virus, las viejas vacunas podrían potencialmente no funcionar contra la enfermedad. Entonces esto crea una sociedad de personas increíblemente vulnerables".

Sin embargo, López intenta tranquilizar: "Se está guardando la vacuna de viruela por las dudas de que exista algún accidente o intención terrorista, y, aunque lo creo altamente improbable, es prudente hacerlo".
¿Realmente la humanidad está ganando la batalla contra este tipo de enfermedades? Y en caso de que surja un nuevo brote masivo de alguna de ellas, ¿estaremos ciertamente preparados?

texto Carolina Koruk

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