Mini & moderno: un departamento funcional de 50 metros cuadrados

El living, el comedor y el escritorio que ocupa la recepción se alinean en esta toma. En el primero, un sofá tapizado en rafia (Desli) matizado con almohadones (Cosa Bonita y Agustina Cerato) le hace frente a una mesita de madera (diseño de la arquitecta) que descansa sobre una alfombra de pura lana (Tribalia). En tanto, un mueble vajillero de madera de lenga lustrada, hecho a medida, da cierre al conjunto. Detrás, el comedor apoya contra un muro pintado de gris, mientras en la pared junto a la puerta de la cocina, un gran espejo redondo con marco de hierro oxidado (Jimena Serradel) agranda visualmente el espacio.

El comedor se arma en función de una mesa heredada y restaurada, con sillas también heredadas y retapizadas con pana de algodón y un banco doble con funda de algodón estampado (diseño de la arquitecta).

La cocina mantuvo su diseño original, con muebles de madera enchapada y mesada de granito. Una pared revestida con machimbre luce dos estantes especieros.

El espacio del hall de entrada se aprovechó para ubicar el escritorio de madera de soita hidrolaqueada (Desli) y la biblioteca que la arquitecta diseñó para acompañarlo. Esta es de hierro con terminación óxido y tiene estantes de chapa. La silla Eames (Kiely) –que se abrigó con una piel sintética (Ikea)–, un canasto revistero y una lámpara con pantalla de madera completan el espacio.

El dormitorio adquiere personalidad con la presencia de una pared –la cabecera– pintada a rayas. Contra ella se apoya la cama, vestida con un acolchado de algodón (De Arrieta), almohadones y pie de cama tejidos (Cosa Bonita) y unos apliques de brazo flexible. Para optimizar el espacio, dos banquetas Tolix (DeSillas) se usaron como mesitas de noche y el placard tiene una puerta espejada que logra que el espacio se perciba más amplio. La lámpara de techo es la silueta de una pantalla realizada con metal (Everything).

El baño se mantuvo con su disposición original, que tiene un vanitory de madera laqueada como pieza central, pero el detalle es la puerta de entrada, que se cubrió con un empapelado (Berry Design); otra idea de la dueña de casa para renovar la apariencia del espacio.

Producción: Natasha Vázquez.

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