La contraplaza

A pocos días de la movilización de Alberto, tuvimos la de Cristina

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Lula Da Silva, Cristina Kirchner y Alberto Fernández encabezaron el acto en Plaza de Mayo (Franco Fafasuli)
Lula Da Silva, Cristina Kirchner y Alberto Fernández encabezaron el acto en Plaza de Mayo (Franco Fafasuli)

Ni la plaza de la democracia ni la de los derechos humanos. Tampoco fue la de este viernes la plaza de la pretendida unidad.

El kirchnerismo en su forma más pura y dura salió a marcar presencia. La tensión al interior de la coalición oficialista se respira en gestos y declaraciones.

A pocos días de la plaza de Alberto tenemos la plaza de Cristina. El poder en la argentina no solo se mide en votos, también cotiza en metros cuadrados. Territorio y caja.

El núcleo duro de la coalición gobernante salió este viernes a redoblar la apuesta, a recuperar la calle. “Hay que reventar la Plaza”, fue la consigna postelectoral con la que Máximo Kirchner convocó a sus fieles.

CFK fustigó al FMI y Alberto Fernández la tranquilizó.

“Primero, tranquila, Cristina, no vamos a negociar nada que signifique poner en compromiso el desarrollo social en la Argentina”, dijo.

La pretendida unidad con la que se llegó a las PASO no alcanzó para ganar. Tampoco para remontarla. Hubo que recurrir a intendentes reticentes y gobernadores que se sentían ninguneados para sumar los puntos que estrecharon los márgenes de la derrota. No obstante, el formato del gobierno que emergió el 14 de gobierno presentado bajo una supuesta autonomía albertista comenzó a crujir esta semana. Les hace ruido

El clima es tenso. Rencores y diferencias se mastican por lo bajo. Una química que no cuaja, que no llega a amalgamar, perturba el eje mismo de la coalición gobernante.

Cristina entrega la lapicera pero parece querer retener el poder. Le quita el cuerpo a las negociaciones con el Fondo, toma distancia por la vía epistolar pero reaparece exultantemente en orden a resguardar su liderazgo y preservar su impunidad. De eso se trata. Alberto vuelve a aclarar que es él quien toma las decisiones. No dice quién anima desde el más allá el rumbo de su convicciones.

El núcleo duro desprecia al Presidente. Lo hace cargo de todo lo que está mal. A él y a los que lo rodean. Vuelve el tema y los funcionarios que, dicen, siguen sin funcionar. Le atribuyen a AF morosidad y procrastinación. también ineficiencia.

Los más reflexivos admiten que el loteo horizontal de los ministerios que se impuso desde el vamos es una dificultad, pero el comisariato político que ejercen las segundas líneas de los ministros sigue firme ocupando sus despachos y activa en los medios.

La vicepresidenta fue una de las principales oradoras de la noche (Franco Fafasuli)
La vicepresidenta fue una de las principales oradoras de la noche (Franco Fafasuli)

En la semana que termina se puso en acto la contenida presión interna. Mientras La Cámpora retoma la presencialidad callejera, Martín Soria avanza sobre la Corte.

La presión sobre los jueces no deja lugar a dobles interpretaciones. “No creo que la Corte se anime a declarar inconstitucional la Reforma del Consejo de la Magistratura”. En materia de impunidad “van por todo”.

Andrés “el Cuervo” Larroque salió a respaldar a Roberto Feletti. “No queda muy bien un ministro desconociendo a un secretario de Comercio”. En su carácter de Secretario general de La Cámpora, el Cuervo quiere apoyo explícito a la política de control de precios.

“Si hay un funcionario que lo está tomando el toro por las astas todos tenemos que apoyarlo, mas que nada el ministro del área”. Insiste el referente de la organización que apuntala a CFK. Teléfono para Matías Kulfas. A poner las barbas en remojo.

El Ministro de la Producción integra el cuadro de honor de los señalados “funcionarios que no funcionan”. En lista de espera para ser eyectados del gabinete en cuanto cuadre.

Connotados referentes de La Cámpora ya dejan trascender sin remilgo las emociones y contradicciones con la que conviven. Están convencidos que los “Albertistas” solo trabajan para que nada cambie, para mantener el statu quo y asegurarse una zona de confort.

Están furiosos con un ministro que supo ser intendente al que le atribuyen de declarada intención de querer destruir al kirchnerismo desde adentro mismo del Ejecutivo,

Dicen que Alberto Fernández montó una estructura de comunicación paralela y que la puso a cargo de funcionarios que se supone renunciaron.

Le atribuyen al Jefe de Estado la construcción mediática discursiva que demanda que CFK acompañe y apruebe un acuerdo con el FMI.

Otro punto de disonancia al interior del Frente de Todos. La Cámpora recela del manejo que la organizaciones sociales hacen de los planes sociales. Apuntan especialmente a Fernado “el Chino” Navarro y a Emilio Pérsico. Referentes del Movimiento Evita y funcionarios con despacho en el Ejecutivo.

Con el Ministro Coordinador no son mucho más piadosos, Juan Manzur, no son mucho más piadosos. “Un día o nos levantamos sin Jefe de Gabinete o él amanece sin la Provincia de Tucumán”. Aseguran que un cambio de Gabinete no pasa de marzo.

La renuncia a su cargo de la funcionaria que nunca asumió Débora Giorgi se inscribe en la misma línea de acontecimientos. La fantasmagórica segunda de Feletti revistaba sin ser designada.

No se trata de una cuestión de nombres sino de fuertes diferencias acerca de las políticas que se adoptan. Las estrategias para contener el precio de los alimentos están en el ojo de la tormenta.

Roberto Feletti y Matías Kulfas
Roberto Feletti y Matías Kulfas

Los dichos de Larroque sonaron a advertencia. “Creo que Kulfas se está dañando a sí mismo(...) se está tirando un tiro en los pies”. Contradicciones a la intemperie.

Los DNU no validados por el Congreso también expresan una pulseada por el poder en el oficialismo. En la última sesión con quórum propio el Senado solo blindó 48 de los 116 decretos firmados por el ejecutivo. Los más ácidos aseguran que se trata de una estrategia de CFK. Una herramienta que se reserva para controlar al Presidente.

El riesgo de fragmentación interna también alcanza a la oposición. Martín Lousteau redobló la apuesta tras la feroz sacudida que aplicó al radicalismo al fracturar el bloque de diputados.

Lo señaló un partido misógino, que se resiste a los jóvenes y en el que prima la mirada pequeña de la política "

Lousteau también va por más. No solo se hace cargo de la ruptura. Se jacta de que la edad promedio de su bloque es 44 años y desde ese lugar presenta un gabinete en las sombras. Se lo acusa de ser funcional al kirchnerismo. De desperfilar la coalición opositora.

Envalentonado sacó del medio el fantasma del Coti Nosiglia. El monje negro del radicalismo. “El liderazgo de Evolución radical lo ejerzo yo y es mi responsabilidad” , bramó. Nafta sobre el fuego.

Losteau ya empezó a pagar algunos precios. Perdió la Vicepresidencia Segunda del Senado a manos de la recién llegada Carolina Losada. Nada es gratis. Todo se paga en política.

La fractura excede al radicalismo e impregna a todo el espacio opositor. Se están matando.

Gerardo Morales, quien presidirá en breve a la UCR, acusa a Horacio Rodríguez Larreta de abducir dirigentes del radicalismo vía el ofrecimiento de cargos. HRL se llama al silencio, pero los suyos señalan al gobernador jujeño como una suerte de aliado encubierto del Frente de Todos.

Las aspiraciones presidenciales hacia el 2023 aceleran las tensiones. Muchos obispos queriendo ser Papa. Sin liderazgos claros a la vista ni en el radicalismo, ni en el PRO, las fracturas y desgarramientos ponen en riesgo la imprescindible unidad de la oposición.

Por ahora el ala dura del macrismo permanece fuera de la disputa. Ellos también maceran sus diferencias. El oficialismo, entretanto, la mira por TV, pochocleando.

La doliente renuncia de Esteban Bullrich puso un toque de humanidad en una semana caliente. Bullrich soltó. En un contexto en el que todos tensan por abulonar a cargos, posiciones y prebendas, el se despojo.

‘Vengo a hacer algo que va en contra de cada fibra de mi cuerpo. La realidad me impone esta decisión” admitió entre lágrimas. Pidió ser recordado por la búsqueda de consensos.

En un mensaje en el que convocó a superar la grieta le recordó a una cámara paralizada por la emoción que " la verdad y la justicia son valores a los que hay que saliera encontrar y no propiedad de alguna de las partes”

“Vivimos en un país enfocado en la grieta y el debate violento. Un país en el que la gente escapa de la política, la desprecia y la condena”.

Expuso su vulnerabilidad y los límites de la condición humana. Trajo a cuento la finitud.

Les recordó a todos que están de paso, que no hay imprescindibles y exaltó el valor del testimonio personal, de la coherencia y del ejemplo como lo ‘único que en definitiva sirve para cambiar el mundo.

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