Ahora debemos incorporar la boleta única y el voto electrónico

El domingo vivimos en todo el país una nueva jornada democrática. Siempre votar es un hecho especial, importante y único. El voto es un deber ciudadano, pero fundamentalmente es un derecho, derecho conseguido gracias a la labor de miles de hombres y mujeres que lucharon para consolidar el sistema democrático en Argentina. Alcanza con nombrar a Raúl Alfonsín para dimensionar la importancia de este pasado reciente de nuestro país.

Además, desde hace unos años existen las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), proceso electoral que da más democracia a la democracia y amplía la oferta electoral.

En Mendoza participó en las elecciones más del 80% de los electores. Eso demuestra que las PASO interesan y sirven porque agregan una instancia de decantación y selección de candidatos y partidos.

Está demostrado que las PASO son un buen instrumento, el problema son los partidos y los candidatos que no quieren o no se animan a utilizarlas como corresponde. En ocasiones los que están en el poder quieren evitar la competencia forzando listas únicas y no debería ser así. Por el contrario, se debería promover la participación y no restringirla. Otros eluden la confrontación democrática legítima, crean nuevos frentes para vaciar y evitar las primarias.

Las primarias permiten presentarse a las diferentes expresiones de un partido, cosa que antes se veía dificultado por el peso del "aparato partidario". Es decir, dan a la ciudadanía una instancia más de elección y permiten a los partidos ampliar la oferta electoral. Por eso es que defiendo el sistema de PASO; no falla el sistema, lo que falla es la implementación.

La aplicación de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias en Argentina significó un salto de calidad institucional y de fortalecimiento democrático. En lugar de ir hacia atrás, debemos perfeccionar el sistema y avanzar con la incorporación de la boleta única y el voto electrónico, la eliminación de las listas sábanas, las colectoras listas espejo y las candidaturas testimoniales, entre otros. Desde el Congreso de la Nación debemos avanzar con la reforma electoral para incorporar estos avances para mejorar nuestra democracia.