El dólar estadounidense se pagó al cierre a 56,47 pesos dominicanos en promedio, lo cual implicó un cambio del 0,73% con respecto a los 56,06 pesos dominicanos en promedio de la jornada previa.
En los últimos siete días, el dólar estadounidense marca un incremento del 0,11%, por ello en el último año aún acumula una subida del 2,95%.
En relación a fechas anteriores, giró las tornas respecto del de la sesión previa, donde se anotó un descenso del 0,09%, mostrando en los últimos días una ausencia de estabilidad en los resultados. En referencia a la volatilidad de la última semana, fue de 7,37%, que es una cifra inferior al dato de volatilidad anual (10,1%), lo que manifiesta que podemos decir que está pasando por un periodo de mayor estabilidad recientemente.
Diagnóstico del peso dominicano
El peso dominicano es la moneda oficial de República Dominicana es abreviada como DOP y su creación data de 1971 tras la ruptura del patrón oro. En un principio era llamado como “peso oro” o “peso oro dominicano”.
Para el año 2010 se hizo una modificación a la Constitución para definir que “La unidad monetaria nacional es el Peso Dominicano”; luego de ello, en el 2017 se comenzó a realizar un reemplazo paulatino de los billetes y monedas con las viejas inscripciones de pesos dominicanos.
Los billetes que actualmente están en circulación son de 50, 100, 200, 500, 1 000 y 2 000 pesos oros. Los billetes de 5 y 10 pesos dejaron de circular y se sustituyeron por monedas de 5,10 y 25 pesos respectivamente. En tanto, los billetes de 500 y 2 000 pesos oro fueron emitidos con motivo del aniversario número 500 del descubrimiento de América y la llegada del nuevo milenio.
Cabe apuntar que todos los billetes llevan la frase: “Este billete tiene fuerza liberatoria para el pago de todas las obligaciones públicas o privadas”.
En el ámbito económico, República Dominicana presentó en el 2022 un sólido desempeño que se ha visto empañado por el bajo crecimiento de los ingresos por una alza en los precios debido a la inflación, que se disparó fuera del rango meta del Banco Central.
Esta situación también provocó un déficit fiscal por los subsidios inesperados para contrarrestar los aumentos de precios, al tiempo que también influyó el conflicto en Europa, pues República Dominicana es un importador neto de petróleo, gas natural, soja, sorgo, trigo y maíz.
El último pronóstico que hizo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) a finales del año pasado, para el 2023 se espera un retroceso o un agotamiento del efecto rebote en la recuperación.
En el caso específico de República Dominicana, se espera que este 2023 el país mantenga su buen crecimiento y logre que el Producto Interno Bruto (PIB) llegue a 4,7 por ciento.