El domingo 18 de agosto será decisivo en la planta de Volkswagen de México en Puebla, pues ese día vence el emplazamiento a huelga y hasta este 15 de agosto no se ha logrado un acuerdo entre el sindicato y la compañía respecto al incremento salarial del 24% global que demanadan los trabajadores.
Las negociaciones son mediadas desde el 7 de agosto por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y hasta hoy no se vislumbran señales de llegar a una resolución sobre la revisión salarial, toda vez que la compañía armadora no ha presentado al sindicato una contrapropuesta.
Hasta ahora, la empresa alemana se ha comprometido a emitir de manera oportuna comunicación sobre la situación en la planta.
Por su parte, los trabajadores confían en que el acuerdo final rebase los dos dígitos debido a que la planta ubicada en Cuautlancingo mantiene un buen ritmo de producción, por lo que ven viable el incremento salarial.
Aunque los representantes sindicales confian en llegar a un acuerdo satisfactorio, también solicitaron a los trabajadores estar preparados en caso de que sea necesario iniciar la huelga. Respecto a la demanda de incremento salarial del 24%, el 21% es directo al salario y el resto en prestaciones.
Por solicitud de EEUU, México revisará derechos laborales en planta de Volkswagen
El Gobierno de México aceptó el pasado 11 de junio una solicitud de Estados Unidos para revisar una presunta denegación de derechos laborales en una planta de Volkswagen en Puebla. La revisión se realizará en el marco del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida (MLRR) del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
La petición estadounidense fue recibida el 28 de mayo, según informaron las secretarías de Economía (SE) y del Trabajo y Previsión Social (STPS).
“La SE comunicó el viernes pasado a la Oficina de la Representante Comercial estadounidense la admisión de la solicitud de revisión recibida”.
Esta inspección surge tras detectar la posible violación de derechos de negociación colectiva y libertad de asociación en la planta de automóviles ubicada en Cuautlancingo, en Puebla.
La situación podría derivar en medidas correctivas para garantizar que se respeten los derechos laborales de los trabajadores de Volkswagen México.
Desde el momento en que se recibió la solicitud, la STPS cuenta con un plazo de 45 días para llevar a cabo una revisión interna y determinar si existe una negación de derechos en la mencionada empresa.
Dos semanas antes, el Gobierno mexicano anunció la conclusión de una revisión en la Minera Tizapa, una subsidiaria de Industrias Peñoles, que resultó en la restitución de ocho trabajadores y la recuperación de pagos de bonos vencidos, entre otras medidas.
El miércoles pasado, el Gobierno mexicano también anunció la conclusión de una revisión en la Minera Tizapa.
En el caso de la mina San Martín, en Zacatecas, un panel laboral resolvió a favor de México el pasado 26 de abril, declarando que no se pueden pronunciar los países sobre posibles violaciones a derechos laborales antes de la entrada en vigor del T-MEC.
El escenario amplía el compromiso del Gobierno mexicano para garantizar el respeto a los derechos laborales establecidos en el T-MEC, un pilar crucial para mantener una relación armoniosa y equitativa con sus vecinos comerciales.
Estas acciones garantizan el cumplimiento y protección de los derechos colectivos de las personas trabajadoras del país.
La revisión solicitada por Estados Unidos y aceptada por México bajo el esquema del T-MEC tiene la intención de detectar y corregir posibles violaciones a derechos laborales esenciales en el sector automotriz, específicamente en la planta de Volkswagen en Puebla.
Este procedimiento refleja un compromiso compartido entre los socios del tratado de asegurar condiciones laborales justas y equitativas.