La desgarradora reacción de una perra de refugio al ver cómo adoptan a todos sus cachorros, menos a ella, conmueve al personal

Después de la profunda tristeza, la madre canina fue salvada por una organización que busca un hogar definitivo para ella

Guardar
La perrita callejera fue separada
La perrita callejera fue separada de sus cachorros, quienes fueron adoptados rápidamente, mientras ella quedó sola. (TikTok: @evelyn.garces_)

En el Centro de Cuidado Animal de Lancaster, ubicado en el sur de California, una emotiva historia conmovió los corazones del personal, voluntarios y miles de personas que la conocieron a través de las redes sociales. Se trata de Mamá Gladice, una perrita callejera de seis años y alrededor de 34 kilogramos rescatada junto a sus cuatro cachorros.

Aunque todos sus pequeños encontraron hogares amorosos en apenas una semana, ella fue dejada atrás, sin entender por qué ya no estaban a su lado. La separación fue profundamente dolorosa y provocó en la hembra una reacción emocional que conmovió a todo el personal del recinto.

Evelyn Garces, testigo y voluntaria del refugio, relató a The Dodo For Animal People, una plataforma con enfoque emocional hacia el cuidado y la defensa de los animales, cómo la canina cambió radicalmente de actitud tras la ausencia de sus cachorros.

“Gladice siempre fue bastante callada y tímida, pero una vez que sus bebés fueron adoptados y se quedó sola, parecía muy diferente”, comentó. “Después de eso, lo único que la vi hacer fue dormir o acostarse. Nunca pude verle una sonrisa ni siquiera menear la cola”.

Para el personal del albergue, fue evidente que la lomito tenía dificultades para integrarse después de lo ocurrido, la tristeza era visible y no daba la impresión de estar próxima a esfumarse. Al respecto, Garces añadió: “Parecía tan triste todo el tiempo, y era como si hubiera perdido toda su hermosa chispa vital. Fue devastador verla así”.

El futuro incierto de Mamá Gladice

Promise 4 Paws Rescue intervino
Promise 4 Paws Rescue intervino y salvó a Gladice. (TikTok: @evelyn.garces_)

A medida que los días pasaban, la situación del animal se volvía más complicada. Según lo detallado por The Dodo, el refugio estaba saturado y su aislamiento emocional afectaba su bienestar físico. Con poco espacio disponible y ejemplares en condiciones similares, Gladice se enfrentó al grave peligro de ser sacrificada.

Consciente de ello, Garces y otros voluntarios lanzaron un llamado desesperado a la comunidad de rescate, haciendo publicaciones en distintas redes sociales que se viralizaron rápidamente.

Milagrosamente, el grupo Promise 4 Paws Rescue respondió a tiempo y sacó a Gladice del refugio, dándole una segunda oportunidad. “Le salvaron la vida”, afirmó la voluntaria del Centro de Cuidado Animal de Lancaster, profundamente agradecida.

Aunque la perrita aún enfrenta problemas de salud que requieren atención, el grupo de rescate se comprometió a brindarle todo el cuidado y amor que necesita hasta que encuentre un hogar permanente. “Estoy seguro de que le encontrarán la familia perfecta”, concluyó Garces.

El impacto emocional de la separación

Perro asustado mostrando señales de
Perro asustado mostrando señales de miedo a través de su lenguaje corporal, una expresión común ante situaciones desconocidas o amenazantes. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

De acuerdo con el portal especializado Experto Animal, la separación prematura entre una perra y sus cachorros puede tener efectos emocionales profundos tanto en los pequeños como en la madre. La tristeza y el decaimiento son comportamientos frecuentes cuando este distanciamiento no ocurre de forma natural y en el tiempo adecuado.

“Una separación no solo va a afectar al bienestar e incluso al comportamiento futuro del cachorro, sino que podemos detectar que la perra extraña a sus cachorros”, señala el portal. Aunque es normal que eventualmente una hembra se separe de sus crías, el desconsuelo que experimentan algunas tras la pérdida o separación puede explicarse también desde una perspectiva fisiológica.

Durante la gestación, el parto y la lactancia, el cuerpo de la cánida pasa por múltiples cambios hormonales que la preparan para cuidar de sus cachorros; cuando esta rutina se interrumpe, el organismo continúa funcionando como si las crías estuvieran presentes, generando un conflicto emocional.

En situaciones extremas, como la muerte de los cachorros, el duelo es aún más evidente. “El cuerpo de la perra se ha preparado durante unos dos meses para gestar, parir y amamantar… En otras palabras, instintivamente, la perra sabe que le faltan sus cachorros”, indica Experto Animal. Además, la producción de leche y otros cambios físicos continúan presentes, lo que refuerza su sensación de pérdida.

Este desequilibrio puede generar una profunda ansiedad por separación, que no está necesariamente relacionada con una dependencia emocional, sino con la incapacidad de gestionar la soledad y la falta de propósito maternal. “El estrés de la situación puede hacer que se muestre abatida”, concluye el portal especializado.