El trabajo es una de las actividades más importantes y que más tiempo demanda en la vida de las personas. La mayoría de los trabajadores transcurre gran parte de la semana en su lugar de empleo, por lo que, pasar un buen momento o disfrutar de lo que uno hace día a día, se vuelve fundamental.
No es casualidad que cada vez más personas agreguen este factor como uno de los requisitos esenciales a la hora de encontrar o quedarse en un trabajo. Por esta razón, las empresas comienzan a poner el foco en el clima laboral y la cultura empresarial con el fin de que sus empleados se sientan más cómodos, lo cual impacta positivamente en el resultado de toda organización.
Lo que para muchas empresas es un descubrimiento reciente, para otras es una cultura instalada desde hace décadas. “Sé que suena muy cliché, pero realmente es así: nosotros nos sentimos como una gran familia”, destacó a Infobae Alejandro Jasiukiewicz, Country Manager de DHL.
Conocida por ser una de las empresas de servicios más famosas en el país, la primera experiencia de servicio que tiene un cliente, la tiene con los empleados, lo que los convierte en el eslabón más importante de la compañía. Este eje tan esencial para el negocio se conecta directamente con la motivación, una de las principales aristas dentro del propósito de la empresa. “Si nosotros tenemos a la gente motivada, brindamos una gran calidad del servicio, que es el segundo pilar. Con un buen servicio, los clientes van a ser fieles y los clientes fieles no sólo no se van, sino que pagan un ‘premium price’. Todo esto forma un círculo virtuoso. Con un propósito claro, logramos tener un engagement alto y ser uno de los mejores lugares para trabajar”, explicó Alejandro.
A su lado se encontraba Anibal Rosales, director de Recursos Humanos, quien explicó un poco más en detalle cómo se vive la cultura empresarial puertas para adentro: “Nosotros sentimos que somos una gran familia, lo vivimos así, la gente lo percibe. El último año, que fue uno muy inquietante, con muchos desafíos, los empleados se sintieron una familia. Porque cuando un compañero nuestro lamentablemente sufría la enfermedad, sentían que no solo estábamos conectados con él sino también con su propia familia”.
Sin dudas, el clima laboral y sensación de comunidad, junto con las encuestas internas positivas que generan anualmente, los llevó a pensar seriamente en la idea de postularse por primera vez en el evento Great Place to Work -donde se premia a las empresas con una gran cultura organizacional-.
“Yo soy Country Manager desde el 2014 y ya veíamos que muchas sedes de otros lugares del mundo participaban de GPTW pero nosotros no”, aclara. Pero las encuestas comenzaron a prender una lamparita en la cabeza de Alejandro quien pensó ¿Y por qué no nos postulamos? Allí comenzó con la gestión para entrar al evento por primera vez en 2015 y finalmente se llevaron la grata sorpresa de lograr el puesto N° 1: “No te puedo explicar la alegría que sentimos todos”, agregó.
El primer puesto como la mejor empresa de más de 500 empleados para trabajar, no solo lo lograron en 2015 sino que se repitió por otros tres años más -2016; 2017 y 2018-
Trabajar en una empresa con buen clima laboral, donde haya un sentimiento de familiaridad y amistad, no solo significa que uno se levanta animado para ir a la oficina -o en esta coyuntura, al sillón de la casa-. También significa mayor productividad personal y, quizás, un deseo de crecer dentro de la compañía y quedarse por muchos años más.
“¿Por qué en DHL estamos tantos años y no nos queremos ir? Porque realmente sentimos el sentido de pertenencia que hace que estemos muy enganchados con la compañía. Esta cultura, este clima hace que los que entran nuevos, enseguida se adapten y no se sientan nuevos o excluidos”.
Sin dudas, cada vez más empresas buscan una estabilidad y buen clima laboral porque saben que es la fórmula adecuada para que sus empleados tengan buen engagement con la empresa y muestren pasión por lo que hacen. Al fin y al cabo, la empresa está conformada nada más ni nada menos por las personas que se levantan todos los días para ir a trabajar. Sin ellos, nada se podría lograr.