En el marco del operativo de seguridad que se implementó para prevenir incidentes durante la masiva movilización en el centro porteño en rechazo al G20, la Policía Federal secuestró palos, gomeras y alcohol, entre otros elementos, en dos colectivos que transportaban militantes del PTS.
El control ocurrió en la intersección de San José y Belgrano, dentro del recorrido de la marcha protagonizada por manifestantes que se movilizaron desde el conurbano y otros puntos de la ciudad de Buenos Aires hacia Congreso para reclamar frente al Parlamento.
En este caso fueron 8 personas a las que se les tomó identificación y luego quedaron en libertad, indicaron fuentes policiales a Infobae. Iban a bordo de dos camionetas fleteras y llevaban consigo banderas del Frente de Izquierda y del Polo Obrero.
En la requisa los efectivos de la PFA encontraron palos, clavos tijeras, cutters, pinzas, llaves francesas, banderas estadounidenses, máscaras de gas y filtros para estas, algodón y alcohol, entre otros elementos que fueron secuestrados.
A lo largo de la jornada se produjeron distintos operativos y fueron detenidas nueve personas. Esta mañana en un control de rutina de Gendarmería hallaron ocho bombas molotov dentro de un taxi quemado a dos cuadras de la marcha.
Más tarde, dos dirigentes del PTS -entre ellos Guillermo Ermili, miembro del PTS y un apoderado del partido- fueron aprehendidos -y posteriormente liberados por orden de la Justicia- por llevar 25 handies de comunicación con aparatos de recarga. Esto fue en el cruce de San Juan y 9 de Julio.
Luego, la División Prevención del Delito de la Policía de la Ciudad, interceptó a tres jóvenes (dos hombres y una mujer de entre 19 y 21 años) que se desprendían de columnas de la Corriente Clasista y Combativa y Barrios de Pie cuando cambiaron bruscamente el sentido de su caminata en la calle Santiago del Estero.
Al advertir los movimientos extraños se les solicitó que abrieran sus mochilas: en ellas tenían gran cantidad de bolitas de vidrio, bulones y tornillos así como gajos de limón para aplicar en los ojos y aliviar los efectos de los gases lacrimógenos. El fiscal Federico Tropea ordenó horas después su liberación.
Por último, en Lima e Independencia detuvieron a cuatro personas más (tres varones de 15 años de edad y un mayor) quienes tenían martillos, piedras, envases con combustible y petardos doble mecha. Uno de los menores fue liberado, los otros dos fueron derivados al Instituto Belgrano y el mayor permanece arrestado.
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