El belga Milan Fretin (Cofidis) gana en un esprint masivo en Roquetas de Mar

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Almería, 16 feb (EFE).- El belga Milan Fretin (Cofidis) se adjudicó este domingo la trigésima octava edición de la Clásica de Almería tras imponerse en un masivo esprint después de 189 kilómetros de recorrido, entre Puebla de Vícar y Roquetas de Mar, Almería, en una carrera marcada por una escapada de seis corredores que al final fue neutralizada por el grupo de favoritos.

La escapada fue perdiendo unidades en cuanto el pelotón se enfrascó en la pelea por hacer de la prueba una llegada masiva, como suele ser tradicional en la Clásica almeriense, y los seis 'valientes' que intentaron dar la sorpresa fueron capturados a 19 kilómetros de la meta, en una fase en la que Lotto, Cofidis y Tudor marcaron en ritmo en los últimos kilómetros y el corredor de Cofidis fue el más listo.

La Clásica de Almería comenzó con el habitual juego entre las fugas y el pelotón. Desde los primeros kilómetros, los ciclistas de equipos modestos buscaron protagonismo, con Unai Esparza, Joan Gamundi, Samuel Fernández y el belga Aaron Van Poucke intentando la primera escapada, aunque su aventura apenas duró dos kilómetros.

Inmediatamente después, un grupo de seis corredores logró consolidarse, con una destacada presencia del Illes Balears, sumando a Édgar Curto, Joan Riera, Ibau Azanza, el italiano Luca Paletti y el belga Victor Vercouillie a la escapada.

Conforme avanzaba la carrera, la diferencia entre los fugados y el pelotón aumentó rápidamente, alcanzando los 2 minutos y 52 segundos antes del ascenso al Alto de Celín. En ese punto, Paletti cruzó primero, seguido de dos corredores del Illes Balears, el mallorquín Gamundi y el catalán Curto.

Entretanto, el viento complicaba la marcha, obligando a un mayor esfuerzo tanto a los escapados como al grupo perseguidor. En el esprint intermedio de Las Norias de Daza, Paletti, Curto y Riera sumaron puntos y consolidaron su posición en la fuga mientras el pelotón mantenía el control de la situación.

Los equipos favoritos comenzaron a reaccionar en la segunda parte de la prueba. Tudor y Q.36_5 aumentaron el ritmo con la intención de que sus velocistas, como Dainese y Moschetti, llegaran en grupo a la meta. En Adra, Curto sumó en el sprint intermedio y se colocó líder de la clasificación específica, mientras que Paletti y Gamundi luchaban por la general de la montaña. La escapada sufrió cambios cuando Riera y Vercouillie intentaron atacar en solitario, aunque fueron neutralizados poco después. El pelotón, con un ritmo constante, empezó a reducir la diferencia con la cabeza de carrera.

Al llegar a Almerimar, con 73 kilómetros por recorrer, la fuga mantenía cerca de un minuto de ventaja, pero la persecución se intensificó. Q36.5, Lotto y Tudor encabezaron la caza aprovechando el viento favorable para aumentar el ritmo.

La diferencia se redujo a 42 segundos al cumplirse la tercera hora de carrera y, con el desgaste acumulado, Curto y Gamundi fueron los primeros en ceder, dejando un trío al frente con 1 minuto y 8 segundos de ventaja. Sin embargo, el empuje del pelotón fue incesante y al paso por Almerimar la diferencia cayó a solo 29 segundos.

El desenlace estuvo marcado por la lucha final entre fugados y pelotón. En los últimos kilómetros, la escapada perdió efectivos hasta que solo Vercouillie resistía con una ventaja mínima de diez segundos al llegar a El Parador, pero al final fue neutralizado a 19 kilómetros de la meta y dejó todo servido para los velocistas.

Con un pelotón compacto y sin margen para más ataques, Cofidis, Lotto y Astana tomaron el control, preparando el sprint final en busca de una victoria que fue para el más 'listo' de la clase, el belga del Cofidis Milan Fretin. EFE

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