Fernando Pérez Soto
León, 13 ene (EFE).- Carlos Álvarez, extremo internacional de Ademar León, quiere salir "por la puerta grande" de su actual club antes de recalar para las tres próximas temporadas en el Sporting, campeón de la liga portuguesa, con el que ya se ha comprometido y que tendrá que abonar una claúsula de rescisión.
El jugador, de 21 años, fue el máximo goleador y jugador más valioso de la liga durante la pasada temporada, y tras la primera vuelta del actual campeonato encabeza la nómina de artilleros.
"Tomar la decisión de irme tenía dos vertientes: la deportiva, que supone un salto importante, y la personal. No ha sido fácil porque he valorado el esfuerzo que hizo Ademar, lo a gusto que he estado desde el primer momento, porque me he sentido muy valorado y he crecido como jugador y persona, por eso nunca olvidaré a este equipo", ha explicado este lunes a EFE.
De hecho, Álvarez reconoce que la sintonía con el técnico, Daniel Gordo, y su nivel de exigencia, pero también de confianza, le han permitido dar un "salto cualitativo" en su juego al poder explotar una de sus virtudes, la versatilidad, para poder actuar tanto en el extremo derecho como también en la posición de lateral.
El jugador pontevedrés ha vivido un 2024 "redondo en todos los aspectos", ya que a sus logros personales unió el poder disputar, por vez primera, competición europea y recibir la llamada de la selección absoluta ante Italia y Letonia.
Su próximo reto será competir con la elite del balonmano continental con el Sporting Portugal que aspira a reeditar todos los títulos en el país luso, e intentar dar un salto más en su crecimiento europeo donde esta temporada ya ha destacado en la Liga de Campeones.
"Es un lujo y un reto poderse enfrentar a los grandes equipos y jugadores, con un nivel de exigencia tremendo, pero también de motivación", ha precisado.
Sin embargo, antes de hacer las maletas cuando concluya la temporada y se cierre de manera efectiva su fichaje con el pago de la cláusula de rescisión -en torno a los 60.000 euros-, Carlos Álvarez quiere hacer un último servicio al Ademar.
Tiene la "máxima motivación" para lograr el objetivo de volver a dejar al equipo en Europa, bien a través de la clasificación en la liga o en la Copa del Rey.
Por ello, ha insistido: "Nadie podrá poner en duda la competitividad, que siempre he demostrado, ni las ganas de ganar y darlo todo porque tengo los cinco sentidos en el Ademar, en competir, hacer disfrutar y seguir creciendo, junto con el equipo, como jugador".
Lo que no tiene son objetivos personales, ni tan siquiera superar la barrera de los doscientos goles de la que se quedó a las puertas la pasada temporada pese a ser el máximo artillero en la liga, ni tampoco tiene prisa por volver a entrar en los planes del seleccionador pese a quedarse con la miel en los labios de figurar en la lista para el Mundial.
"Todo lleva una evolución y hay grandes jugadores por delante, por lo que se trata de ir mejorando y crecer", ha concluido. EFE
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