Dos empleados de un desguace explican “lo que hay que hacer cuando arde un Tesla”: “¿Estamos preparados para afrontar este escenario?”

El incendio en los vehículos eléctricos es distinto al fuego que puede ocasionarse en vehículos de combustión tradicionales, por lo que es necesario un protocolo específico

Guardar
Dos empleados de un desguace
Dos empleados de un desguace enseñan un Tesla. (desguacemotocoche)

Los incendios en vehículos, sean eléctricos o de combustión, siempre son eventos peligrosos, pero sus causas, evolución y la forma en que deben abordarse varían considerablemente dependiendo del tipo de automóvil involucrado.

A medida que los coches eléctricos se han vuelto más populares, la pregunta que surge es cómo comportarse ante un incendio en comparación con los tradicionales de motor de combustión.

Primero hay que entender que existen diferencias. En los coches de combustión, el fuego generalmente se origina debido a la ignición de los combustibles, como gasolina o diésel. Esto puede ser causado por fallos en el sistema eléctrico, fugas en los conductos de combustible o sobrecalentamientos del motor. Las altas temperaturas alcanzadas por el motor de combustión o un accidente en el que se dañen los sistemas de combustible pueden generar una chispa que cause el incendio.

Por otro lado, los incendios en coches eléctricos suelen originarse en las baterías de litio. Estas baterías son altamente eficientes, pero también son más susceptibles a fallos si se dañan o sobrecalientan. Los incendios pueden ser provocados por cortocircuitos, daños físicos o fallos en los sistemas de carga. Las baterías de iones de litio pueden arder a temperaturas extremadamente altas y liberar gases tóxicos en el proceso.

Incendios más largos

Una de las diferencias más marcadas es la velocidad con la que el incendio se propaga y su duración. En los coches de combustión, aunque el fuego puede ser rápidamente alimentado por el combustible, una vez que el sistema de combustible se consume, el incendio puede estabilizarse o extinguirse más fácilmente.

En los coches eléctricos, las baterías de litio pueden continuar ardiendo durante un largo periodo, incluso después de que el coche haya sido apagado. Según la empresa especializada en la Protección Contra Incendios Prefire, las baterías pueden volver a arder hasta 24 horas después de apagar el fuego.

Dos bomberos muertos en el incendio en un garaje en Alcorcón.

Dos empleados de un desguace, conocidos en TikTok como @desguacemotocoche, explican en un vídeo cómo es el protocolo de actuación en su centro en el caso de que un vehículo eléctrico comience a arder. “¿Estamos preparados para afrontar este escenario?“, se preguntan.

En su demostración, los empleados enseñan un vehículo Tesla que les ha llegado recientemente al centro. Cuando este comienza a arder los empleados proceden a protegerse primero con ropa ignífuga, entre ella una chaqueta y los guantes.

Qué es y cómo funciona la manta ignífuga

Después, recurren a una manta ignífuga para desplegarla sobre el coche. Se trata de un dispositivo de seguridad diseñado para sofocar o controlar el incendio de las baterías de litio, que como se ha explicado anteriormente pueden prolongarse mucho tiempo.

El funcionamiento de una manta ignífuga, explica la empresa especializada en prevención de incendios Copersa, se basa en varios principios: aísla el fuego del oxígeno al cubrir el vehículo en llamas, lo que sofoca las llamas al interrumpir el suministro de oxígeno.

Está fabricada con materiales resistentes al calor, como fibra de vidrio y evita que la manta se queme o degrade. Además, al cubrir el vehículo, reduce la propagación del fuego a otras áreas y minimiza la liberación de gases tóxicos, protegiendo a las personas cercanas. En muchos talleres se usa este dispositivo como medida preventiva durante las tareas de mantenimiento o carga de las baterías.