El juez que investiga a Rubiales por el beso a Jenni Hermoso cita a declarar como testigos a cuatro altos cargos de la Federación

Nuevos avances en el procedimiento judicial por el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso en la celebración del Mundial femenino de Australia. El juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha citado a declarar en calidad de testigos a cuatro altos cargos de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Se trata del director de Marketing, Rubén Rivera; el director de Integridad, Miguel García Caba; el director de la Selección, Albert Luque; y la jefa de prensa de la selección femenina, Patricia Pérez.

Según informan fuentes de la Audiencia Nacional, los cuatro empleados de la RFEF comparecerán ante el juez instructor “en los próximos días”, aunque aún no ha trascendido la fecha exacta de la citación. El magistrado De Jorge accede así a la petición de la defensa del expresidente de la RFEF, a cargo de la abogada Olga Tubau, que le solicitó la comparecencia de estos cuatro nombres de la Federación.

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Dos de los citados, Rubén Rivera y Albert Luque, fueron señalados por las jugadoras de la Selección por haber acudido al viaje a Ibiza como supuesta medida de presión a Jenni Hermoso en plena polémica por el beso de Luis Rubiales a la futbolista. Los otros dos nombres, el de Miguel García Caba y Patricia Pérez, están vinculados, ya que la jefa de prensa de la selección femenina, según una información de Relevo, habría declarado ante el departamento de Integridad sintiéndose presionada por el círculo de Rubiales. Además, habría sido la persona que enseñó a Jenni Hermoso el comunicado que la RFEF emitió en palabras de la futbolista.

La citación de estos cuatro cargos de la Federación llega días después de la comparecencia de Rubiales ante el juez De Jorge, quien le impuso una orden de alejamiento de 200 metros respecto a Hermoso, con la que también tiene prohibido comunicarse por cualquier medio durante la instrucción del procedimiento. La teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez Gil, había solicitado como medidas cautelares para Rubiales una orden de alejamiento de 500 metros, la prohibición de las comunicaciones con la futbolista y la obligación de firmar en el juzgado cada 15 días.

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Rubiales negó las coacciones a Hermoso

En su declaración, el expresidente de la RFEF negó que el beso a Jenni Hermoso se produjese sin el consentimiento de la jugadora española. También declinó que él y otros altos cargos de la Federación ejercieran presión sobre Hermoso y su círculo más íntimo.

Antes de llamar a Rubiales a declarar en la Audiencia Nacional, el juez instructor acordó una batería de primeras diligencias que se centraban en la ingente cantidad de grabaciones que dejaron constancia de los hechos. En concreto, el magistrado De Jorge solicitó a RTVE que le remitiera todas las imágenes en su posesión que recogieran el beso de Rubiales a Hermoso “desde todos los ángulos en el que el querellado besa a la denunciante”, además de los minutos inmediatamente anteriores y posteriores al momento.

Asimismo, requirió a los diarios El País, La Vanguardia y AS distintos vídeos sobre el instante del beso, así como de las posteriores celebraciones de la expedición española tanto en el vestuario como en el autobús.