La Universidad Católica Argentina (UCA) realizó la ceremonia de colación de grados académicos del Departamento de Educación, de la Facultad de Ciencias Sociales, bajo los recaudos sanitarios que exige la pandemia por COVID 19. En el acto estuvo encabezado por Monseñor Mario Poli, cardenal primado de la Argentina y Gran Canciller de la UCA, y lo acompañaron el rector de la Universidad Miguel Ángel Schiavone, la decana Liliana Pantano y la directora del departamento Gabriela Azar.
“Hoy celebramos un hito fundamental para nuestro país. Se graduaron 57 docentes universitarios en educación inicial y primaria, con un modelo pedagógico innovador que denominamos Aprendizaje inclusivo y efectivo (AIE)”, dijo emocionada Gabriela Azar, directora del Departamento de Educación de la UCA.
“Enseñar es el arte del espíritu humano”, agregó el primado a los protagonistas de una fecha histórica para la UCA y para el país: “La educación es un acto de amor, de amor supremo, hasta tal punto que es una obra de misericordia material: enseñar al que no sabe”.
Por su parte, el rector se dirigió a los egresados con una pregunta: “La incorporación de nuevos docentes a un sistema educativo tan deteriorado: ¿será suficiente para su transformación? ¿Podremos formar otro modelo de ser humano, otra cultura u otra sociedad con este aporte? A lo cual respondió: Ustedes como nuevos profesionales, con nuevas técnicas pedagógicas y nuevos saberes van a contribuir a que todos los niños se desarrollen en plenitud en el marco de una verdadera revolución ética y social y podrán construir en ellos las habilidades necesarias para que lleven adelante sus proyectos de vida”.
Asimismo, la decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Liliana Pantano, tuvo a cargo la apertura de la ceremonia. “El desafío de una pandemia, sin invitación, fogueó e interpeló a muchos de nosotros. El verdadero dilema no es ya la innovación tecnológica sino la evolución de la enseñanza universitaria como contracara de un aprendizaje inclusivo y efectivo en distintos contextos y escenarios”, dijo en su cálido y emotivo discurso.
Durante la jornada histórica, también hablaron las dos graduadas que fueron distinguidas con la medalla de oro, (promedio 9,62) Camila Etchegoyen y Bernardita Llauró. “Todos valoramos la educación y ya sea como maestros de nivel inicial, de primaria, secundaria, universidad, directivos o profesores, todos elegimos servir y devolver un poco a nuestro país en esto que le es tan necesario: la educación”.
¿Qué es el modelo AIE?
El modelo pedagógico innovador AIE tiene como premisa central que todos aprendan óptimamente, cualquiera sea su situación, garantizando así calidad y equidad educativa. AIE recupera el humanismo y personalismo y combina estrategias innovadoras y actuales para enseñar de todo a todos.
Este modelo, inspirado en el del Alverno College, Estados Unidos, e ideado por un equipo de profesores liderado por Gabriela Azar, fortalece una formación basada en capacidades que garanticen la integración formativa del saber, saber hacer y saber ser. Integra estudiantes que provienen de diversos sectores sociales, transversaliza la tecnología, cambia la mirada de la evaluación hacia una propuesta formativa y cualitativa y reivindica una nueva ética docente en el compromiso donde todos son responsables del aprendizaje óptimo de todos, alentando así el trabajo colaborativo.
Los desempeños de los estudiantes se evidencian en un portafolio que integra todas sus producciones en su trayectoria académica, demostrando su saber hacer. La evaluación es a través de rúbricas que cualifican logros y estimulan a la mejora continua. La práctica docente se concreta a lo largo de roda la carrera evidenciando capacidad para insertarse en escuelas diversas.
La red de escuelas AIE es una comunidad de práctica que integra a nuestros estudiantes. El claustro docente se reúne todas las semanas, en día y horario fijo, para capacitarse y monitorear los avances del proceso.
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