El miércoles pasado, los padres organizaron por primera vez una clase abierta frente a la Quinta de Olivos, en reclamo al cierre de las escuelas en la provincia de Buenos Aires. Una semana después, la iniciativa continúa y cobra cada vez más impulso.
A la espera de novedades respecto a las nuevas restricciones que anunciará el Gobierno, decenas de chicos de inicial, primaria y secundaria se congregaron hoy en la puerta de la residencia presidencial. Bajo la coordinación de un grupo de padres, llevaron sus tareas para hacer al aire libre e incluso sus netbooks para seguir estudiando.
Hoy la iniciativa contó con la presencia de Silvia Torres Carbonell, directora del Centro de Entrepreneurship del IAE. La profesora les habló sobre emprendedorismo a los chicos. Les mencionó los requisitos necesarios para convertirse en emprendedores -entre ellos, contar con una fuerte base educativa- y les compartió unas fotocopias con inventores reconocidos junto a sus desarrollos. Después hicieron una puesta en común y una ronda de preguntas.
“Estamos esperando ver qué medidas toman el gobierno a ver cómo seguimos”, dijo María, una de las madres que impulsó la propuesta, dando a entender que de extenderse la suspensión de las clases, seguirían con la actividad en Olivos.
Desde el lunes pasado, se cerraron las escuelas del conurbano bonaerense. Casi 3 millones de chicos volvieron a, en el mejor los casos, la virtualidad. Con ese panorama, los padres llevaron adelante un sinfín de manifestaciones e incluso presentaron amparos judiciales para continuar con las clases presenciales.
“A partir del DNU que sacó el Presidente, a través de chats de WhatsApp nos fuimos dando cuenta de que éramos muchos los que sentíamos una impotencia tan grande. Nos organizamos para venir a la Quinta de Olivos para hacer más visible el reclamo”, comentó a Infobae María, una de las madres que impulsó la iniciativa.
“No solo estoy acá por mis hijos. Como país no vamos a llegar a ningún lado si no le damos la importancia que tiene la educación. Hoy tenés demasiados chicos que ni siquiera pueden acceder a la virtualidad. Sin educación no hay igualdad de oportunidades para todos”, señaló Cristian, uno de los padres que hoy monitoreó la actividad.
En teoría, hasta el viernes las escuelas bonaerenses permanecerán cerradas, pero los padres creen que las medidas se extenderán, incluso más allá de un mes. “Es muy agotador para nosotros tener que hacer de padres, docentes y encima reclamar por la presencialidad”, dicen.
Con esa presunción, desde el lunes los padres llevaron adelante distintas acciones para reclamar por la educación presencial: organizaron abrazos simbólicos a las instituciones, sentadas, clases públicas y manifestaciones frente a la quinta presidencial.
En la provincia de Buenos Aires, todos los municipios del conurbano tienen las escuelas cerradas. A ellos se sumaron en las últimas horas Zárate, General Villegas y Castelli que retrocedieron a fase 2 y también interrumpieron la actividad presencial.
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