Para estabilizar la economía, el campo reclama un acuerdo político para después de las elecciones

Referentes de la dirigencia agropecuaria y la cadena agroindustrial opinaron sobre el actual contexto de la Argentina, de cara a los comicios legislativos del 14 de noviembre, y las expectativas del sector para luego de los mismos, mientras la situación climática se va agravando por la falta de precipitaciones, y los efectos negativos de la crisis económica complican el negocio de los productores.

Frente a este panorama tan incierto, y ante un escenario también complejo desde lo político y social, el campo reclama un acuerdo de toda la clase política para ordenar la macroeconomía y que a su vez otorgue previsibilidad y reglas claras para una actividad que necesita recuperar la confianza, luego de varios desencuentros con el Gobierno de Alberto Fernández tras el aumento de la presión impositiva y mayor intervención en los mercados, como sucedió con el cierre de las exportaciones de carne vacuna, con la excepción de las cuotas arancelarias, y de maíz.

El presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y Vocero del Consejo Agroindustrial Argentino, José Martins, sostuvo en diálogo con este medio que de cara a las próximas elecciones y solamente deteniéndose en ese momento, “lo primero que se impone a nivel país es que las fuerzas políticas puedan lograr un acuerdo mínimo de algunos puntos en común para que se estabilice la macroeconomía y que aparezca un plan económico mínimo y consensuado por todos los partidos en el Congreso, que otorgue un marco de previsibilidad. Si esto no sucede será muy difícil seguir haciendo negocios en este entorno”, comentó el dirigente.

En la misma linea de la máxima autoridad de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, se pronunció el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino. “Más allá de los resultados que arroje la elección de medio término de los próximos días, acá lo más importante es que al día siguiente de la misma la política en general de una buena vez asuma la responsabilidad que tiene y se llegue a un consenso para definir cómo sigue adelante la Argentina. Es difícil un país donde los números de pobreza llegan casi al 50% y eso nos tiene que avergonzar, no solamente a la dirigencia política sino también a todos los ciudadanos. Sin un acuerdo político que permita transitar este momento complicado, no hay plan económico que resista. La prioridad es arreglar la política, para que luego se pueda desarrollar la economía”, dijo.

Por otro lado, en lo relacionado a la agroindustria José Martins comentó que se impulsarán acciones que quedaron pendientes en la agenda de trabajo. En primer lugar aparece el pedido de envío al Congreso de la Nación del proyecto de desarrollo agroindustrial que anunció semanas atrás el Gobierno, mediante el cual se promueven medidas para aumentar la inversión en el sector. En ese sentido hay un compromiso de los integrantes del Consejo Agroindustrial de trabajar con todos los bloques legislativos, con el objetivo de intentar mejorar la propuesta y que la misma sea aprobada a la brevedad. Por otro lado, desde el espacio privado se promueve el anteproyecto de ley de Buenas Prácticas Agropecuarias, con todo lo que tiene que ver con las aplicaciones de fitosanitarios, y que ya se encuentra en el Consejo Económico y Social.

Otro de los temas que mencionó el referente del Consejo Agroindustrial es la eliminación de los derechos de exportación para las economías regionales, tras la promesa realizada por los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Agricultura, Julián Domínguez, de trabajar en ese sentido. También enfatizó como “necesario e imprescindible” un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, para luego sentarse a dialogar con el Gobierno sobre un programa de reducción progresiva de los derechos de exportación del resto de las exportaciones agroindustriales, y que el mismo se traduzca en un aumento de la actividad y del aporte a la economía. “Es trascendental que después de las elecciones bajemos un cambio y empecemos a buscar acuerdos, para transformar a la Argentina en un país con igualdad y oportunidades”, agregó José Martins.

Otras opiniones

En la parte gremial de la dirigencia agropecuaria, sostienen como uno de los ejes centrales para luego de los próximos comicios es que se pueda mejorar la actual relación con el Gobierno que conduce Alberto Fernández. Al respecto, Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), sostuvo que el oficialismo “tiene que cambiar su visión sobre el sector y es necesario que definitivamente los preconceptos que en muchos aspectos el Gobierno tiene sobre el campo sean cambiados. También necesitamos hechos, reglas claras que se puedan sostener en el tiempo y que generen previsibilidad”.

A todo esto, el dirigente confederado recordó que “el Gobierno ha perdido mucha credibilidad dentro del sector agropecuario y no será fácil restablecerla. En la medida que observemos que haya hechos concretos, podemos estar pensando en que hay una definición clara de cambiar el rumbo y que tengamos una dirección de ir a otros objetivos, que estén relacionados al crecimiento y al desarrollo, se fomente la inversión y que haya una mayor producción. Estoy convencido que lo único que nos puede sacar de este difícil momento en el que estamos es un aumento de la producción y demostrar así que el campo una vez más es el puntal al momento de aportar alimentos y recursos al país”.

En el seno de la Mesa de Enlace plantean como principal reclamo hacia la administración nacional, es la reapertura total de la comercialización al mundo de carne vacuna que se encuentra hasta el 31 de diciembre con restricciones, como el sistema de cuotificación para la exportación de carne de vaca manufactura o conserva a China, además de la prohibición para exportar siete cortes populares. Decisiones del Gobierno, que desde mayo pasado y hasta la actualidad le significó a la cadena de ganados y carnes pérdidas superiores a los 1.000 millones de dólares.

Economías regionales

Pablo Vernengo, Director Ejecutivo de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), señaló a Infobae que la entidad promueve una agenda de trabajo de las economías regionales para luego de las elecciones legislativas. Entre las medidas transversales a todas las actividades primarias y agroindustriales, se encuentra un rediseño del esquema tributario, evitando la superposición de tasas y tributos en los 3 niveles. Actualmente, nuestro país tiene más de 160 impuestos, una de las presiones tributarias más altas a nivel mundial. El desafío es lograr un sistema tributario más racional que contemple la sustentabilidad de la pyme agropecuaria y le permita recuperar rentabilidad. Esto posibilitará invertir en I+D, lográndose mayor productividad y la creación de más cantidad de puestos de trabajo genuinos.

Tal como lo planteó José Martins, desde CAME también se reclama la eliminación de los Derechos de Exportación a todas las economías regionales. Sobre un total aproximado de 8.500 posiciones arancelarias, a fines de 2020 el Gobierno modificó 4.593 posiciones, mientras que la normativa de junio 2021 sumó 67 productos, eliminando los derechos de exportación a 17 y reduciendo los de otros 50. En síntesis, del total de posiciones modificadas, que alcanzan a 4660, solamente para 963 se eliminaron completamente (0%) los Derechos de Exportación.

A su vez, Vernengo señaló que se seguirá trabajando para garantizar el pleno cumplimiento de la Ley 27.541 “Solidaridad Social y Reactivación Productiva”, Artículo 52º, que prohíbe superar el cinco por ciento (5%) de alícuota de derechos de exportaciones a los productos agroindustriales de las economías regionales definidas por el Poder Ejecutivo nacional. Por último, otra de las medidas que se promueve desde la Confederación es asegurar el funcionamiento de observatorios de precios, con el objetivo de mitigar y desalentar conductas anticompetitivas y conocer la verdadera incidencia de cada eslabón en la cadena de valor.

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